«No es lo que ustedes piensan…», bromeó J. C. Rodríguez sobre cuando un periodista encontró a Ariela Medeiros escondida en su cama
«Yo no tengo mucho recuerdo, pero seguramente ella habrá estado llegando de un viaje y no tenía dónde llegar…», bromeó Julio César Rodríguez sobre la situación que contó en diciembre pasado el periodista Luis Sandoval y donde lo involucró con la ex bailarina de Mekano, la brasileña Ariela Medeiros.
Ahora, en un capítulo de Síganme Los Buenos, que Rodríguez conduce en el canal VIVE y al cual estuvieron invitados Sandoval y su colega Sergio Rojas, volvieron al tema:
Julio César Rodríguez: “Se me olvidó que estoy enojado con Lucho”
Luis Sandoval: “¡¿Por qué?! ¿Por lo que conté la otra vez?”
Rodríguez: “Me enojo y después se me olvida que estoy enojado”
Sandoval: “¿Pero por qué se va a enojar? Si son tallas”
Rodríguez: “Porque contaste una cuestión poh”
Sandoval: “Sí poh, pero fue verdad. Excelente jefe, cuando estábamos trabajando (en un programa de farándula) nos decía ‘chiquillos, vénganse a mi departamento’ y nos invitaba a comer sushi, súper gentil. Y una vez yo fui al departamento de Julio, un departamento maravilloso, un loft que se llama… ¿Lo puedo contar o no?”
Rodríguez: “Si ya lo contaste. Si estoy enojado contigo por eso”
Sandoval: “¡¿Pero por qué te enojas?! Es divertido, porque eras un hombre soltero. Entonces yo voy y estaba que me hacía pipí. ‘Julio, ¿dónde está el baño?’. Había una escalera y a mano izquierda estaba el baño. Yo subo la escalera…”
Rodríguez: “Oye, pero los detalles que se acuerda Lucho. Ni yo me acordaba. Claro, porque abajo no había, tenías que subir”
Sandoval: “Tenía que subir la escalera, a mano izquierda estaba el año y a mano derecha estaba tu habitación, y todo abierto porque era un loft. Yo voy al baño y empiezo a mirar todo, como cuando vas a la casa de un famoso.
“Estoy en el baño, me lavo las manos, salgo y de repente en la cama como de tres plazas que tenía Julio, blanco, con un plumón maravilloso, se movía. Yo decía ‘me he tomado dos micheladas, no puede ser que se esté moviendo esta cama’.
“Y se movía como algo misterioso. Dije ‘están los compañeros abajo, está Julio abajo…’, y moviéndose algo debajo del plumón. Como periodista copuchento, voy y me empiezo a acercar a la cama, y Julio estaba abajo conversando. Y de repente me acerco y hago esto…”
Sergio Rojas: “¡¿Y quién aparece?!”
Sandoval: “Echo el plumón para atrás y aparece una rubia espectacular: Ariela Medeiro estaba metida en tu cama. Guapísima, y me dice ‘hola’. ‘Hola’. Y como que nos cortamos ambos y me fui y no le dije nada a Julio”
Rojas: “Pero lo más raro es que estaba todo pasando abajo, ¡¿por qué Ariela estaba ahogada abajo de ese plumón esperándote?!”
Rodríguez: “No es lo que ustedes piensan”
Rojas: “Pero una explicación coherente”
Rodríguez: “Yo no tengo mucho recuerdo, pero seguramente ella habrá estado llegando de un viaje y no tenía dónde llegar…”
Rojas: “¡Ah, tan noble!”
Sandoval: “Y tú la acogiste”
Rojas: “Tú la acogiste muy bien, tan generoso que eres tú”
Rodríguez: “Y era tan la precariedad en ese momento, que yo arrendaba ese piso…”
