Cómo le cambió la vida a Alvaro Rudolphy: «Yo me veía a los 70 años en una (moto) Harley, botas vaqueras, chaqueta de cuero, operado entero, con melena, por Miami…»
«Yo era el que llevaba la bandera de lucha de que los que no se iban a casar y de los que no íbamos a tener hijos, y tenía casi un grupo de seguidores», afirmó Alvaro Rudolphy en una entrevista en el programa de Canal 13 De Tú a Tú.
El actor de 58 años se casó a los 44 con la periodista Catalina Comandari. Su hija mayor la tuvo a los 46 años y el segundo, un niño, a los 48.
El protagonista de teleseries clásicas, desde Amores de Mercado a Perdona Nuestro Pecados, contó su proceso:
Martín Cárcamo, conductor del programa: “¿Conviviste pololeaste, tuviste pololeos largos o cortos?”
Álvaro Rudolphy: “Cortos. Tres meses. Tres meses. Tres meses. ¿Para qué más?”
Cárcamo: “No eras estable”
Rudolphy: “No, nada. Además que después influyó que empiezo a salir en la tele, empecé a ganar lucas, soltero y tímido, con hartos rollos, entonces fui soltándome”
Cárcamo: “¿Pero te planteaste tener una relación estable o una familia en esos años?”
Rudolphy: “No, nada. Ni una posibilidad. Es más, yo era el que llevaba la bandera de lucha de que los que no se iban a casar y de los que no íbamos a tener hijos, y tenía casi un grupo de seguidores.
«Tenía unos argumentos… Ahora ya se me olvidaron, pero sólidos. Llegaba a una reunión y decía ‘pensemos con la cabeza, ¿de qué estamos hablando?, ¿qué es el matrimonio? Y los hijos…’. Y todos ‘sí, tiene razón, es una weá casarse’.
“Desarrollé muchas teorías y le di muchas vueltas en la cabeza. De partida, la visión que yo tenía de los niños era espantosa: unos seres, unos monstruos horrendos, que te invadían el espacio, la libertad, que te coartaban todo. Y ahora los amo. Me tienen mal”
Cárcamo: “Tú dijiste ‘yo no me voy a casar, no voy a tener hijos’, ¿pensabas eso en verdad?”
Rudolphy: “Absolutamente. Estaba absolutamente convencido. Yo me veía a los 70 años en una (moto) Harley, con botas vaqueras, chaqueta de cuero, operado entero, con melena, por Miami. Después estaba ahí con la mamadera, limpiando. Y ahora no corto ni pincho. ‘Papá, papá’”.