«No me atendió el teléfono. Ahora lo entiendo todo…», afirma Sabrina Sosa sobre el nuevo affaire de Roberto Cox, con Francisca Undurraga
«No tiene por qué darme explicaciones de nada», responde Sabrina Sosa sobre el romance que mantienen Roberto Cox y Francisca Undurraga.
Sosa mantuvo un affaire de meses con el periodista de Chilevisión, antes de Undurraga. Cada vez que en el programa de farándula donde trabaja, Sígueme y te Sigo le consultaron por su relación con Cox, Sosa evadió el tema.
Cuando respondió lo hizo de manera breve y jugando, nunca directamente sobre lo que se le preguntaba. Siempre calificó al rostro de Chilevisión como un amigo, también cuando se publicaron fotos juntos en Santiago y otros lugares.
Esta vez tomó la misma actitud cuando en Sígueme y Te Sigo hablaron del affaire de Cox y la modelo de fotos sensuales en Instagram. Este fue el diálogo:
Andrés Baile: “Hace dos fines de semana el señor Cox, ex amigo de Sabrina, fue a Buenos Aires a ver a su madre y también fue al estadio de Boca Junior, a la Bombonera. Adivinen quién más estaba en ese estadio a esa misma hora y en el asiento de al lado”
Titi García-Huidobro: “¿La Sabrina?”
Mauricio Israel: “Algo con nombre de alcohol: Undurraga”
Baile: “Sí. La señorita Undurraga”
Israel: “Acá llegó otra información: el domingo salieron juntos”
García-Huidobro: “¿Tenías antecedentes, mi querida Sabrina? Disculpa que te lo pregunte, a lo mejor no quieres contestar, ¿pero sabías algo de esto?”
Sabrina Sosa: “No, nada. De hecho: yo le hice un encargo a Roberto de Buenos Aires”
Baile: “El cuando fue a ver a su mamá y que estaba con la Fran Undurraga en el estadio de Boca, ¿usted lo llamó antes para hacerle un encargo?”
Sosa: “Claro. Que me traiga unas galletas de Argentina que aquí no están”
García-Huidobro: “Eso significa que ustedes siguen hablando, que siguen teniendo buena onda con Roberto”
Sosa: “Sí. Siempre tuvimos buena onda y hablamos hasta el último día”
Israel: “¿Y te trajo las galletas?”
Sosa: “El otro día lo llamé para preguntarle si me había traído las galletas y no me atendió el teléfono. Ahora lo entiendo todo”
García-Huidobro: “¿Y nunca más te contestó?”
Sosa: “No. No me contestó. Me llamó la atención”
Baile: “¿Hasta el día de hoy no sabes si te trajo las galletas?”
Sosa: “No. Porque lo llamé y no me contestó. Qué voy a seguir…”
García-Huidobro: “A la Sabri la veo tranquila, no siento que te esté doliendo el corazón”
Israel: “La Sabri acaba de contar algo que de alguna manera le tiene que haber afectado, que no te contestara el teléfono”
Sosa: “Que no me traiga las galletas para mi hijo, que el sábado cumple años, ¿y cómo le voy a hacer la chocotorta?… Me pareció raro que no me contestara el teléfono”
Israel: “¿Te molestó?”
Sosa: “Fue extraño. Cuando uno dice ‘bueno, ¿y qué pasó?’. Qué raro que no me atendió, porque habíamos hablado hace poquitos días atrás por el encargo. Pero no sé”
Israel: “¿Pero te molestó?”
Sosa: “No. Feliz de que Roberto encuentre el amor. Y que todo el mundo encuentre el amor, inclusive yo”
Israel: “¿Pero te hubiera gustado que te lo dijera?”
Sosa: “No. No tiene por qué darme explicaciones de nada”.