«Hoy nadie puede decir que le debo un peso en este país»: después de 15 años Mauricio Israel pagó la deuda que tenía con Rodrigo Herrera
«Me alegro de poder mirar a la cara a Rodrigo y a todos. Puedo caminar con la cabeza en alto», afirma Mauricio Israel en el portal La Hora, luego de pagar la deuda que mantuvo durante 15 años con Rodrigo Herrera.
El comentarista y el periodista deportivo trabajaron juntos y mantenían una fuerte amistad. Herrera participó en la compra de un automóvil para Israel, quien, en diciembre de 2008, huyó del país dejando deudas por más de 200 millones de pesos. Entre ellas, la del auto adquirido por Herrera, quien luego hizo pública su frustración por el hecho.
Esta semana ambos se reunieron en una notaría del centro de Santiago y sellaron la entrega de un vale vista por 2,7 millones de pesos. La ocasión fue grabada por el sitio LaHora, donde ambos fueron entrevistados.
Israel declara en el mencionado portal:
«Estoy muy contento porque no solo cierro un ciclo con Rodrigo, sino que cierro un ciclo total. Hoy nadie puede decir que le debo un peso en este país. Para mí era un tema pendiente desde el día que me fui… Sí fue un tema que se alargó lamentablemente, pero al final es un tema de voluntades y, cuando hay ganas de hacer las cosas, se hacen».
«El apretón de manos que nos dimos con Rodrigo y la conversación que sostuvimos antes de entrar a esta sala deja en claro que aún existe cariño, pese a todo».
«Se termina para mí una etapa difícil de mi vida, ahora sólo queda mirar hacia adelante. Me alegro de poder mirar a la cara a Rodrigo y a todos, puedo caminar con la cabeza en alto».
«El era más que un compañero de trabajo, y eso era lo que más me dolía de haberle fallado. Forjamos una amistad que iba más allá, él era mi mano derecha, mi confidente, el que estaba ahí en las buenas y las malas».
En tanto, Herrara afirmó:
«El paso del tiempo es relevante, pero también valoro que se haya llegado a esta reparación, estos procesos son sanadores. Agradezco la voluntad de todas las partes, por lo tanto es bueno este fin de ciclo, tanto para mí como para Mauricio».
«Fue un proceso difícil, pero más allá de eso, es tener mirada de futuro, dejar de lado cualquier tipo de diferencia o rencilla de lado. Hay que saber llegar a acuerdos».
