Glamorama
Kel Calderón junto a sus padres en fotos de su juramento como abogada que ella y su Argandoña comparten en sus Instagram.

«Ya eres una flamante abogada»: el reencuentro público madre hija tras cuatro años en que Kel no le habló a Raquel

Autor: C. Farías / 30 agosto, 2024

«Ya eres una flamante abogada. Felicitaciones», fueron las cuatro palabras que Raquel Argandoña le dedica a su hija Kel en Instagram. Significan un mundo para la comunicadora de 66 años porque sellan el reencuentro en público con Kel Calderón, luego de cuatro años en que la hoy abogada no le habló a su mamá.

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Calderón Argandoña juró como abogada en la ceremonia que se realiza en la Corte Suprema. Comenzó a estudiar en la Universidad de Chile en 2010. En 2016 aprobó su examen de grado. En 2017 hizo la práctica y en marzo de este año aprobó su tesis. Y este viernes, en el juramento en la Suprema, estaban sus padres, con quienes se fotografió.

La ex intérprete de La Quintrala se mostró llena de dicha. Un hecho policial las había separado con su hija. En agosto de 2020, Nano, el hermano de 27 años de Kel, apuñaló a su padre, el abogado Hernán Calderón Salinas, de 71 años.

Tras el delito cometido, Argandoña apoyó de manera incondicional a su hijo. En tanto, Kel se alineó con la defensa de su padre, declaró voluntariamente en dos ocasiones durante la investigación y acusó que “mi mamá junto a la defensa (de Nano) va al departamento de mi papá y lo amenazan y extorsionan”.

En noviembre de 2020 Kel afirmó: “Nunca pensé que mi mamá, por proteger a mi hermano, iba a ser capaz de hacerme tanto daño a mí». La joven cortó relaciones con ella y con Nano.

En 2022 Argandoña confirmó que seguía incomunicada con su hija. En el estelar Podemos Hablar declaró: “Yo tengo dos hijos. A uno de mis hijos yo me he tratado de acercar mucho, pero llega un minuto en que tú dices ‘basta’. O sea, basta. La persona sabe dónde yo vivo, sabe que, si algo le pasa, un, dos, tres, siempre voy a estar ahí. Lo que necesite lo va a tener.

“Pero yo tampoco puedo seguir mendigando amor ni tampoco cariño. O sea, ya han pasado dos años y, si las cosas no se dan, no se dan. Pero no por eso me voy a quedar llorando todo el día, las 24 horas en mi casa, porque yo tengo derecho también a vivir».

Kel no cedía. Hasta que, en enero pasado, la animadora de Tal Cual fue internada de urgencia y operada debido a una obstrucción intestinal. Entonces su hija rompió el cerco y le mandó un ramo de flores. Ella lo agradeció con el alma y afirmó que sentía que faltaba poco para ese reencuentro que tanto ansiaba.