Se conocen desde los 18 años, estudiaron en los mismos lugares, eran amigos y ahora pololean: Martín Cárcamo y la pintora Carolina Sepúlveda
«Fue todo muy orgánico», dice Martín Cárcamo sobre su nueva polola, la pintora Carlina Sepúlveda. Se conocieron en tercero o cuarto medio, cuando estudiaban en el mismo colegio y después en la Universidad Viña del Mar. Eran amigos, formaban parte del mismo grupo. Pero amigos nomás.
Los dos armaron sus vidas, sus familias, tuvieron a sus hijos, se separaron. Y se reencontraron. En una junta con más cercanos ellos se quedaron conversando hasta más tarde. Entonces hubo una química de otro tipo. Hubo atracción. Amor. Y hace dos meses se pusieron a pololear.
La pareja dio una entrevista a Only Fama, el programa que los «sorprendió» caminando juntos por Concón. Así, de manea «casual», el animador que le pregunta por romances y divorcios a sus invitados en De Tú a Tú, pero que nunca habló de su separación matrimonial de la madre de sus hijos, en 2013, ni tampoco de los nueves años de pololeo con la maquilladora Ale del Sante, esta vez fue un libro abierto.
Cárcamo y Sepúlveda revelaron que se gustan por las conversaciones que tienen y que, como se conocen hace tres dévadas, no necesitan presentarse ni a sus familias ni a sus hijos. Ha sido «todo orgánico», como cataloga él.