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Camila Andrade versus Claudia Schmitd: «Ella estuvo en un programa nocturno y yo estoy súper lejos de eso»

Autor: admin_copesa / 3 septiembre, 2014

 

Camila Andrade, Miss Chile 2013, no es solo es una cara bonita en Intrusos. También opina y le pone el pecho a las balas cuando debe opinar sobre alguna polémica farandulera. Y lo hace con autoridad. Su aparición como panelista del espacio de La Red ha sido unas de las notas altas del programa durante estos últimos meses.

 

Hasta impone un poco de humor, como cuando imita a la perfección la voz de una colombiana. Andrade tiene clara la película, y se visualiza en la farándula con criterio. “Soy absolutamente una opinóloga y un personaje televisivo en construcción. Tengo muchísimas cosas que aprender”, dice en entrevista a glamorama.latercera.com. 

 

La ex Calle 7 no le teme a las comparaciones y a la batalla con SQP. Tampoco a los prejuicios por ser opinóloga. Además, muestra toda su chochera al hablar de su pololeo con Daniel Valenzuela, a pesar que este ultimo estuvo como opinólogo un día en la competencia.

 

¿Cuál es su estilo como opinóloga?

 

“Lo que puede pasar en Intrusos, especialmente conmigo, es que yo digo las cosa con convicción, y digo las cosas así porque es lo que realmente pienso. Sinceramente, mis dichos, comentarios y opiniones las digo de una manera muy respetuosa. Puedo decir realmente lo que pienso, pero con respeto. No soy una mujer que vaya muy a la defensiva o que se deje llevar por la opinión del otro. Obvio que no le digo ‘sí’ a todo, porque sería fome, redundante, y probablemente no me querrían en el programa. Soy directa, transparente, pero a la vez respetuosa, sin tratar de herir”.

 

¿Qué es lo bueno y lo malo de estar en un panel de farándula?

 

“Como todo, tiene sus pro y sus contras. En mi caso, es bueno, porque estas en una plataforma donde la gente te conoce desde otro punto de vista, en especial a mí que he estado en programas juveniles, en un docureality, gané un concurso de belleza, y es bueno que conozcan ese lado, que es mi lado. Que sepan mi manera de pensar, y de qué manera me puedo desenvolver ante un tema. Y también mi lado más risueño, con mucho más humor y sin restricciones, más allá de la pauta en al cual nos regimos. Y cosas malas, es que algunas veces sucede que uno no puede ser muy empático con un tema, aludiendo a un personaje de la TV, y te puedas sentir atacada o sentido conmigo por este trabajo que lo practica harta gente”.

 

¿No tiene miedo a que su imagen se vea afectada por estar en farándula?

 

“No. Sinceramente, los pasos que voy dando son seguros y de muchísimo crecimiento. Y si volvería a hacer lo que ya hice, creo que no, porque sería retroceder, volver a lo mismo. Una experiencia que ya viví y que me enriqueció como persona.

 

“No creo que me afecte (estar en la farándula). Estoy segura que si hay alguna persona, alguna productora a cargo de algún ‘Miss’, le siga gustando como una posible candidata, me volvería a llamar. No creo que me afecte este trabajo en el mundo de la belleza. Muy por el contrario. Soy embajadora de distintas marcas, por el título que obtuve, y que se revalida por estar en televisión. Más bien, es un complemento”.

 

 

En su competencia, SQP, hay una opinóloga que de alguna manera se asemeja al rol que hace usted, como Claudia Schmitd ¿Cómo se ve frente a ella? ¿Qué las diferencia?

 

“De verdad, no tengo ningún referente de personaje en la farándula, ni menos me compararía con alguien. Somos todos tan diferentes. Y siento que tampoco se parecen mucho nuestros trabajos previos al que tenemos actualmente. Ella estuvo en un programa nocturno muchos años, donde hizo conocida y famosa por eso, con Kike Morandé, y yo estoy súper lejos de eso. Estuve en un target de público sumamente distinto, en un público más familiar, juvenil, donde me hice conocida”. 

 

“Me parece que somos súper distintas. Y claro, además, ella es igual de directa que yo, pero tiene menos pelos en la lengua que yo. Es mucho más tajante y drástica”.

 

¿Usted no busca tanto el conflicto?

 

“Trato de ser yo. Si en algún minuto me tengo que enfrentar a algún conflicto, lo voy a enfrentar como en la vida real lo haría. Si en el fondo, cuando el personaje se come a la persona, es lo terrible. Hay que seguir siendo de igual manera, y que todo vaya sumando y contribuyendo a ser un mejor personaje o panelista dentro del programa”.

 

Dice que vienen de mundos diferentes en la TV. Usted de programas juveniles y Schmitd de un programa nocturno. ¿Eso es lo que las diferencia?

 

“Más bien son personalidades y edades distintas, etapas diferentes. Ella tiene mucho más experiencia que yo. Quizás conoce mucho más la industria, porque lleva muchos más años inserta. Yo solo llevo 4 años en TV, por lo que es muy difícil comparar desde ese punto de vista”.

 

¿Cómo crees que ha sido la competencia entre ustedes y SQP estas últimas semanas?

 

“Me camiseteo mucho por el equipo donde trabajo. Es real y cierto lo que te voy a decir. Intrusos, televisivamente, es una familia. Tenemos a la ‘Abuela’ (Pamela Jiles) que es una experta y con camino recorrido; José Miguel Villouta; yo con ‘Guagüito’ (Michael Roldán); la Jennifer Warner, que es como la mamá de nosotros. La idea es esa: hacer un panel familiar y en donde nos sintamos a gusto”.

 

¿Cómo va la relación con Daniel Valenzuela?

 

“Mmm… Bien. Es complejo hablar de este tema, pero bien. Estamos muy contentos, pololeando, como ya dije, y cuidando la relación, como a mí me gusta hacerlo. Es importante cuidar las relaciones, sobre todo cuando son al principio, y en eso estamos. Disfrutando, pasándolo bien. Estamos los dos contentos y felices”.

 

Él estuvo en SQP hace unos días ¿No le hizo un poco de ruido eso de que su pareja estuviera en la competencia?

 

“Alcanzamos a competir un par de horas. Peo bien. La verdad es que nada. Distinto sería si él trabajara allí, pero fue una vez no más a dar su opinión. No lo pude ver, no sé cómo lo hizo, pero claro, si estuviera trabajando allí sería hasta sabroso, porque somos pareja, pololos, y estamos compitiendo en el mismo rubro, y a la misma hora, pero no es el caso. Fue una vez”.

 

¿Conversaron de eso? ¿Cuál fue su reacción?

 

“Nada. En el equipo me molestaron, en la interna porque, claro, estábamos siendo competencia en ese minuto, pero nada. Fueron más bien preguntas de rutina. Cómo fue, cómo te sentiste, y todo bien. No mucho que comentar, porque no nos vimos. Lo importante es que se sintió cómodo, y todo bien”.