«Tu marido está denunciado por violación ¡y tú estás muerta de la risa!»: El duro round de Fran García-Huidobro con la esposa de Tito Fernández
«¡Estás muerta de la risa! O sea, tu marido está siendo denunciado por violación y tú estás llamando a un programa de televisión, o te llamamos nosotros, ¡y estás muerta de la risa!».
Esta fue una de las notorias interpelaciones en Primer Plano de Fran García-Huidobro a Lu Rivera, esposa de El Temucano Tito Fernández, el famoso cantautor denunciado ante la justicia por tres mujeres por acoso sexual y violación.
El caso del autor de La Casa Nueva fue destapado por Alejandra Matus en un reportaje en The Clinic. La periodista investigó desde julio a las tres mujeres que fueron sometidas por el intérprete de 75 años a través de una organización que funcionaba como una especie de secta.
Fernández tiene un Centro Integral de Estudios Metafísicos. En Wikipedia se describe como «un grupo de lectura y conversación en torno a la metafísica a partir de textos espirituales escritos por él mismo unos años antes».
Según The Clinic, algunas de las mujeres que asistían al centro eran seleccionadas para integrar un club secreto, en donde iban ascendiendo de categoría. La última fase incluía una prueba de fidelidad al «maestro» Fernández, en la cual debían «entregarle su energía sexual» a través de siete encuentros sexuales.
Las tres querellantes cumplieron en parte o totalmente la última prueba, pero en algún momento se liberaron, revelaron y se dieron cuenta que en realidad habían sido abusadas. Por eso recurrieron a la justicia.
Lu Rivera, la esposa de Fernández, asegura que no existía esta supuesta secta y que las tres denunciantes sí fueron a moteles con su marido. Dice que su cónyuge le contó sobre esto y que se trató de un intento para recuperar sus capacidades sexuales ya que, desde una operación a la próstata en el año 2000, El Temucano es impotente.
Anoche Alejandra Matus fue a Primer Plano para explicar en detalle la historia. Mientras que Rivera realizó un contacto telefónico con el estelar de CHV, en el que, como siempre, se mostró muy distendida, y, en momentos, dando una pizca de ironía a sus palabras.
Lu saludó y se refirió a Julio César Rodríguez como un hombre súper educado, instruido y al que le tiene mucho aprecio. Al contrario, a García-Huidobro le dijo: «Quiero dirigirme a Fran, decirle que está muy bonita, como cada viernes. Ella es preciosa», en tono sarcástico.
Julio César Rodríguez sacó a relucir el que no es lo normal que una esposa acepte que su marido vaya a moteles con otras. Y Lu comentó: «Oye, Julio César, no hablemos de soga en la casa del ahocardo. Por favor».
La Fran tomó nota del comentario y comenzó una serie de encontrones con Rivera. Uno de los momentos álgidos fue el siguiente:
García-Huidobro: «Cada una hace de su casa una farmacia, un supermercado, lo que mejor le parezca. Sin embargo, tengo que ponerme un poco más puntúa, porque te estás yendo a lo personal con nosotros… Dijiste que en esa época tu marido no estaba muy bien sexualmente.
«Es decir, que le permitiste estas canitas al aire para ver si al tipo se le volvía a despertar. O sea, a un hombre que a los 65 años, que yo entiendo que aún están en la sexualidad plena, ¿tú le permitiste para que se le levantara?»
Lu Rivera: «Mira. Si tú piensas, o conoces, o has tenido relaciones con un hombre de 65 años…»
García-Huidobro: «¡No! Todavía no, por suerte»
Rivera: «Bueno. A esa edad, como yo tuve la oportunidad de comprobarlo, empieza a decaer»
García-Huidobro: «Entonces, cuando empieza a decaer ¡¿una se lo presta a otras?! Digo, para que me aconsejí poh»
Rivera: «A ver, ¿quieres que te instruya?»
García-Huidobro: «Si me tengo que meter con un señor de 65 ¿qué? ¿Me tengo que enterar que ya no funciona?»
Rivera: «No sé como piensas tú»
García-Huidobro: «¡Pero te digo como piensas tú! ¡Tú dijiste que tu marido a esa edad estaba fuera sexualmente! Estaba de capa caída. Entonces le permitiste esto. ¡Entonces explícame tú!».
Durante el contacto telefónico, la esposa de Fernández dio la impresión de estar ninguneando a la animadora, aceptando como interlocutor válido solamente a Julio César Rodríguez. Y se produjo el round más duro, luego de que el periodista consultó por los ritos de iniciación de las mujeres del club del Temucano:
Lu Rivera: «A ver, a ver, Julio César… Tú no. Por la educación que tienes, no puedes decir que no conoces algún rito de iniciación»
Fran García-Huidobro: «¡Já! ¡¿Y yo sí?! ¡¿Yo sí puedo decírtelo?!»
Rivera: «Puedes decirlo. Si no los conoces…»
García-Huidobro: «Me parece que estás demasiado muerta de la risa para lo que estás viviendo»
Rivera: «No estoy muerta de la risa».
García-Huidobro: «¡Estás muerta de la risa! O sea, tu marido está siendo denunciado por violación y tú estás llamando a un programa de televisión, o te llamamos nosotros, ¡y tú estás muerta de la risa!»
Rivera: «Me llamaron ustedes»
García-Huidobro: «Por supuesto que te llamamos nosotros, gracias por responder. Pero estás muerta de la risa»
Rivera: «No. Pero si tú te pones tan beligerante, yo no puedo hablar contigo. Yo a todos los programas que he dado cuñas, siempre he sido distendida. Yo estoy enfrentando con mi esposo un hecho grave. ¿Qué quieres que haga? ¿Me quieres llorando en este momento? Porque puedo llorar»
García-Huidobro: «No. Para nada» –MIRE AQUI EL VIDEO-.