Laura Prieto: “La cuarentena hizo que el cuerpo a una le cambiara. No sé si uno come de más, o te pones a hacer menos ejercicio, más ansiedad…»
«La cuarentena hizo que el cuerpo a una le cambiara», dice Laura Prieto.
La figura televisiva se contactó, hace más de tres semanas, con una transmisión en vivo por instagram del sicólogo Luis Gavilán.
La actriz de origen uruguayo se refirió a temas de la cuarentena y de la sociedad chilena.
“Chile es un país sumamente superficial, súper prejuiciosos, la etiqueta altiro: ‘Cuica’, ‘flaite’, ‘esta es para presentársela a la mamá…’”, fueron algunos de sus dichos.
Tambiém opinó de los influencers de instagram, afirmando que “la gente no está en una foto en un living precioso del barrio alto o de Miami. Está en sus casas, usando la bolsita de té dos veces…”
En tanto, sobre las consecuencia del encierro frente al covid-19 en los hábitos alimenticios y las variaciones de peso de las personas manifestó:
“A mí lo que me ha pasado, y he sondeado entre mis amigas, es que la cuarentena hizo que el cuerpo a una le cambiara. No sé si uno come de más, o te pones a hacer menos ejercicio, más ansiedad, pero el cuerpo cambia, el ánimo cambia, la autoconfianza cambia, el no poder salir. Y claro, lo que más me llamó la atención entre las mujeres es su inseguridad con el cuerpo.
“Todos los comentarios fueron ‘estoy subiendo de peso’ o ‘los pantalones no me entran’. Igual siento que con mi grupo de amigas hemos sabido llevarlo bien y decir que esto es una circunstancia que está pasando. Hay muchas limitaciones, una tiene mucha ansiedad y también es un poco aceptar el cuerpo y aceptar los procesos.
“Una, como mujer, no se puede engañar cuando dice ‘me quiero poner los jeans que tenía y usé en el verano’, o ves tus fotos del verano y estás con más retención de líquido. A mí me pasa que este tema a las mujeres nos complica más que a los hombres, porque siento que a los hombres mientras más volumen haya es como mejor. No quiero generalizar, pero a las mujeres nos gusta vernos flacaa.
“Pero al hombre, si estás unos kilos pasadita, como que les da lo mismo. Dicen ‘tengo de dónde agarrar’. O no se dan cuenta o se hacen los weones, porque una sube así los kilos. Y los hombres, por miedo a no cagarla, dicen ‘sí, pero yo no lo noto’; ‘bueno, sí, un poquito’. Pero siempre sentí que las mujeres nos preocupábamos más de estar flacas que los hombres por vernos flacas”.
