«Ponemos a la venta la casa… Llega (el comprador) y le digo ‘te voy a mostrar mi dormitorio. Esta pieza esta llena de sexo. Aquí te vas a volver loco'», comenta Luis Jara
«Mi casa de 18 años, donde murió mi mamá, donde crecieron mis hijos, donde hicimos carretes con…», comentó Luis Jara en Los 5 Mandamientos sobre su hogar en Chicureo.
Este año el cantante vendió esa casa y se trasladó con su familia a vivir a un departamento en el condominio Commodore, en Key Biscayne, Miami.
De visita en Chile para promocionar su nuevo disco Toda Una Vida, Jara estuvo en el programa de conversación que conduce Martín Cárcamo en Canal 13 donde, entre otros temas, relató el proceso de venta de su hogar. Este fue el diálogo:
Luis Jara: “Hay muchos que se emborracharon en mi casa, eso es difícil de olvidar. Nosotros estábamos en Miami un rato, yo me vine y hablé con mi cuñado, que es el que maneja mis cosas, y le digo ‘vendamos la casa’. ‘¿Cómo vamos a vender ahora en pandemia? ¿Quién te va a comprar esta weá?’. ‘¿Perdón?’”
Martín Cárcamo: “Perdón, esta casa tiene mucha historia”
Jara: “Y resulta que ponemos a la venta la casa y de repente mi cuñado me dice ‘tenemos comprador’. Yo le digo ‘¿en serio? Ya, pero yo la voy a vender. Yo voy a estar con el probable comprador’. Entonces va, llega y él no sabía que era yo el dueño de casa”
Cárcamo: “Apuesto que tú saliste vestido de blanco, con unos anteojos la raja y con unas alpargatas”
Jara: “Es que yo en mi casa siempre ando con bata. Entonces le mostré toda la casa, la vendí, olvídate, y le digo ‘por favor toma asiento’. Antes que hable el corredor de propiedades. ‘Yo no estoy vendiendo una casa, yo te estoy vendiendo un hogar, esto que está acá es un hogar’.
“Yo dramatizo todas estas cosas, porque soy muy intenso, pero la verdad es que soltar una historia, la Silvana no estaba y me tocó a mí cerrar la puerta por última vez. Entonces yo le dije a Nicolás, que trabaja conmigo, ‘hagamos un registro de este momento histórico en nuestra vida’ y tiré un video a mis cercanos, que saben que yo soy un tipo que celebra la vida.
“Y esa casa para mí es muy significativa, muy simbólica, como la casa que todos hemos querido construir, pero que es un hogar, es un lugar que tiene emociones, hay una energía que nosotros dejamos ahí.
“Entonces yo no estaba vendiendo una casa con paredes, había un registro mío muy potente y de mis hijos y todos. Entonces le digo ‘te estoy vendiendo un hogar’. Y le digo ‘ven, te voy a mostrar mi dormitorio. Siéntate. Esta pieza esta llena de sexo. Aquí te vas a volver loco, porque la energía que yo estoy dejando no tiene precio’.
“Me dijo la típica del comprador, ‘déjame darle una vuelta’. Y a las 48 horas me dice ‘me quedo con tu hogar’”
Cárcamo: “Qué lindo”
Jara: “Y se vendió, son cosas materiales”.