«Nunca voy a olvidar el desatino de esa doctora cuando le dice en su cara a mi mamá ‘usted tiene Alzheimer’. ¿Por qué se lo dijo? Mi mamá no estaba preparada…», relata Tonka Tomicic
«Darle la mejor atención y demostrarle así y devolverle así todo el amor que nos dio. Además del lugar, tiene sus cuidadoras 24/7, que son espectaculares. Porque en nuestras casas no le podríamos dar esa atención», dice Tonka Tomicic sobre su madre.
Marija Petric, de 74 años, la mamá de Tonka y su hermana Mirela, sufre de Alzheimer se encuentra en una residencia desde hace unos años.
La animadora de Canal 13 habló del tema en pantalla por primera vez en diciembre de 2020. Ahora, en Socios de la Parilla, que conducen Pancho Saavedra, Jorge Zabaleta y Pedro Ruminot en la misma señal, le consultaron:
Pancho Saavedra: “Estar trabajando y hacerte cargo y lidiar con los problemas de salud de tu madre, ¿cómo has vivido ese proceso?”
Tonka Tomicic: “Como todas las personas que trabajan y que tienen o han tenido a un familiar enfermo. En este caso no es que mi mamá tenga una enfermedad que tenga mejoría, sino que tiene Alzheimer súper avanzado.
“A quién no le ha pasado de tener que estar trabajando, rendir en tu pega y tener otras preocupaciones. No creo sentirme ni especial ni haberlo vivido de una manera extraordinaria, porque a muchísimas personas les ha tocado afrontar algo así.
“Y por supuesto que hay que dividirse, y es un poco más complejo cuando tienes que mostrar tu cara y tienes que entregar energía, y a veces tienes que estar contento cuando no tienes muchas ganas de celebrar o de compartir en un tono que no te acompaña en la interna”
Jorge Zabaleta: “¿Pero tienes una red familiar que te acompaña?”
Tomicic: “Mi hermana y yo, somos las dos solas. Y ha sido difícil, pero mi mamá tiene lo mejor que le podemos dar. Desde un comienzo todo lo que hicimos y las decisiones que tomamos fueron para ella, para que ella estuviera en el mejor lugar posible, con la mejor atención.
“A veces pienso que nos podríamos haber percatado mucho antes, porque la enfermedad da ciertas luces con mucho tiempo de anticipación, pero nunca piensas que va a ser realmente esa enfermedad o que va a avanzar tan rápido. A mí mamá le avanzó bastante rápido y la pandemia no le ayudó”
Saavedra: “¿Cómo se fueron dando cuenta?”
Tomicic: “Cuando una persona vive sola, mi mamá independiente, sola, y te empiezas a dar cuenta de que baja de peso, por ejemplo. Le preguntas una cosa, la olvida, o te repite una y otra vez el mismo concepto o algo, ya la situación está más decantada, se desencadenó.
“Olvidos sutiles podrían darte una noción de que las cosas no están bien. Y como mi mamá probamos primero unos parches, no le funcionaron bien. Tuvo mucha terapia cognitiva, y todavía la tiene, para tratar de mantener lo más activo posible su cabeza”
Zabaleta: “¿Ella se da cuenta?”
Tomicic: “No. Ahora ya no. Cuando se empieza a dar cuenta, muchas veces confunde la enfermedad como si fuera una depresión, porque te deprime mucho y te frustra mucho empezar a percatarte de lo que te está pasando. Y la desesperación que genera el saber que estás olvidando y que algo te está pasando.
“Además que fuimos a un doctor, y nunca voy a olvidar el desatino de esa doctora cuando le dice en su cara a mí mamá ‘usted tiene Alzheimer’. ¿Por qué se lo dijo? Mi mamá no estaba preparada para escucharlo. Nosotros tampoco, pero podríamos haberlo escuchado nosotros y haber visto la mejor manera de contarle.
“Pero mi mamá cuando lo escucha se viene abajo, entonces ahí se mezcló la depresión, la ansiedad y darte cuenta lo que está pasando. Ahora mi mamá está súper bien cuidada, está en el mejor lugar que puede estar, no siempre nos conoce, pero dentro de todas sus condiciones está contenta.
“Y eso nos tiene tranquilas. Porque mi mamá es una mujer que lo dio todo, todo, todo por nosotras. Y nosotras le damos todo, todo, todo”
Zabaleta: “Poder darle esa dignidad a una persona”
Tomicic: “Porque es caro. Y darle la mejor atención y demostrarle así y devolverle así todo el amor que nos dio. Además del lugar, tiene sus cuidadoras 24/7, que son espectaculares. Porque en nuestras casas no le podríamos dar esa atención.
“Porque mi mamá tiene kine todos los días, terapias todos los días. Siempre tiene actividades, siempre hay música, baile, siempre pasa algo y eso la mantiene súper activa. Mi mamá, tú la ves, y pucha, se ve impecable”
Saavedra: “¿Y qué pasa cuando tú recuerdas a tu mamá súper independiente?”
Tomicic: “Es que hace falta. Sí poh, una la echa de menos, mucho, porque es tu mamá poh, es tu apoyo. Nosotras éramos las tres súper unidas. Mi mamá viene de una isla de Croacia, es muy sola acá, no tiene ni un familiar, muy apegada a nosotras”
Saavedra: “¿Qué es lo más difícil de enfrentar de esta enfermedad?”
Tomicic: “Al principio no saber. Hay mucha información que uno no maneja y cada persona evoluciona de una manera distinta. Hay personas que se ponen un poco más agresivas, hay otras que quieren escapar de casa. Cada familia, si ha vivido esto, sabe lo que significa tener una persona así dentro de la casa.
“No es fácil el manejo de una persona con demencia. Lo más difícil es que tú te das cuenta que la persona lo está pasando mal cuando no tiene una medicación que la mantenga armónica. Ahora mi mamá está bien armónica, no lo pasa mal, su organismo no está sufriendo”.