«Una foto donde yo tenía un alfiler en la frente, un alfiler en la boca, un alfiler en el corazón y el otro alfiler en mis genitales…»: Paul Vásquez y el «amarre» que le hizo ex polola
«Para mí fue de alto impacto, de verme una foto mía clavado», comenta Paul Vásquez, sobre la situación que pasó con una ex pareja hace décadas.
El humorista de 55 años relató la historia en Podemos Hablar, en Chilevisión:
«Yo tuve un amor, de juventud, cuando apenas tenía bigote y barba. Tenía la misma cara de weón, pero sin bigote… Esta mujer se obsesionó… Porque si llega a este extremo es una obsesión ya.
«Cuando yo decidí terminar la relación y seguir caminando en la vida, ya convivíamos, teníamos la rancha donde vivíamos, y de repente voy sintiendo…
«La sensación que yo sentía era que ella me ponía los cuernos. Empiezo a sentirme mal y llego a la casa como un celópata, buscando pruebas de algún tipo de celos que yo sentía.
«Yo lo confundía con celos, que yo estaba celoso, que por eso estaba terminando, porque ella estaba clara, que ya temía algo y todo. Empiezo a buscar, en cajones, y de repente, en una tomá de ropa, cae una foto en que salíamos los dos, pero la parte de ella no estaba y solamente estaba mi parte.
«Donde yo me encontraba, tenía un alfiler en la frente, un alfiler en la boca, un alfiler en el corazón y el otro alfiler en mis genitales Brígido»
Jean Philippe Cretton, animador: «Eso es lo que se podría denominar como ‘el amarre'»
Paul Vásquez: «Para mí fue de alto impacto, de verme una foto mía clavado. Empiezo a averiguar a quién voy. Por eso la juventud debe entender que la gente mayor no tiene las canas de weones, las tiene porque han vivido… Y voy donde una… Y ella me recomendó que, cuando sacara los alfileres, fuera en agua correntosa. Que la foto y los alfileres los quemara y que fuera arrojado donde el agua corriera.
«Yo, asustado, no lo hice en el baño, que el agua corre, fui a un canal a botar para que corriera».
Cretton: «¿Y esto lo hablaste con ella, o nunca fue un tema?»
Vásquez: «Ahí obviamente fue mi gran empuje para salir de la casa. Yo la confronté con la foto, y al confrontarla con la foto no había más que hablar».