2217212.jpg

El juguete que marcó y emocionó a Polo Ramírez

Autor: admin_copesa / 21 noviembre, 2015

A la gente del matinal Bienvenidos le gustó tanto la sección de los recuerdos que hacen en el Mucho Gusto, de Mega, que la copiaron. Entonces, los rostros del espacio de Canal 13 se encontraron con grandes cajas, con una sorpresa para cada uno: Los juguetes más queridos de su infancia –MIRE AQUÍ EL VIDEO-.

 

A Polo Ramírez le consiguieron una figura G.I. Joe similar a la que el periodista adoraba cuando era pequeño y que se perdió durante un viaje. La idea surtió efecto. No es que el panelista llorara de conmovido, pero el recuerdo sí le llegó:

 

Paulo Ramírez: “¡Oh! ¿Existe todavía esto? Este es un G.I Joe ¡Oh! ¡No lo puedo creer! Es el mismo, con el pelo. Yo añoraba, ¡añoraba este juguete! Lo único que quería cuando tenía unos siete años.

 

“Vivíamos en Estados Unidos en esa época. Estos habían salido, estos muñecos articulados, el famoso G.I Joe, y lo único que quería. ‘¡Papá, cómprame un G.I Joe! ¡Papá, cómprame un G.I Joe!’.

 

“Hay una historia que igual fue dura, porque nosotros nos vinimos a Chile, yo tenía como 8 años, más o menos. Y cuando nos vinimos, yo obviamente que lo que más quería era el G.I Joe y lo que más me preocupaba era mi G.I Joe.

 

“Eran caros. Mi papá estaba estudiando allá y tenía que trabajar, además. Mi mamá cuidaba niños, lavaba frazadas, hacía pequeños negocios con unos tomates y con esas cosas. Nos podían dar estos pequeños regalos, y a veces no eran tan pequeños. Esto era con lo que yo soñaba”.

 

Para completar el cuadro emotivo, habló Santiago Ramírez, el papá del panelista:

 

“Su hermano mayor, que siempre ha sido interesado en hacer negocios, repartía diarios, le ofreció al Polo no sé cuánto, diez, 15 centavos. Y con eso se compró esos monitos, soldados de juguete que median como 18, 20 centímetros, articulado, G.I Joe, y era moreno.

 

“La cuestión fue que se encariñó con ese juguete e iba para todos lados. Donde íbamos, él salía con su juguete y en las noches lo movía, jugaba, qué se yo… Nos tuvimos que venir de Estados Unidos. Mi mujer con mis tres hijos se vinieron primero.

 

“María Angélica puso todas las cosas en las maletas, los fui a dejar al aeropuerto y no las pesamos. Teníamos sobrepeso y el G.I Joe quedó en una maleta, esa maleta fue la que sobró y la mandamos por carga.

 

“Cuando dejé la maleta, pensé que iban a robarnos la maleta. ‘Bueno’, dije yo, ‘cómo va a ser tanta la mala suerte’. Al día siguiente me llamó María Angélica para contarme que habían llegado bien, pero que la maleta la habían abierto y se robaron algunas cosas, entre ellas el G.I Joe.

 

«Fue un desastre para Polo en su llegada de vuelta a Chile, por casi 3 años. Lo pasó mal, quedó muy triste”.