La inesperada escapada de Benja Vicuña ante incómoda pregunta
Ya está todo más claro que el agua: Pampita y Benjamín Vicuña se separaron y no hay posibilidad de reconciliación como pareja. No hay terapia, no hay nada. Sin embargo, la modelo y el chileno continúan siendo el principal objetivo de los programas de farándula. Y, como anécdota, los medios argentinos cuentan que una admiradora salvó al actor chileno de la pregunta incómoda de un notero que le dio alcance en plena calle, en Buenos Aires.
Un periodista del matinal Desayuno Americano, del canal América TV, lo abordó a la salida de un restaurantedonde fue a comer con un actor español. Comenzó haciéndole preguntas sobre la grabación de su próxima película. Todo iba bien, hasta que salió el tema Pampita –MIRE AQUÍ LA INFORMACION Y EL VIDEO QUE ENTREGA EL SITIO ARGENTINO CIUDAD-.
“Sé que es un tema incómodo, pero, ¿cómo están las cosas en tu vida personal?”. Benja se tomó la cabeza y respondió: “Bien. O sea, estamos… Ustedes saben que yo no hablo de eso, no hablo de mi vida privada y espero que se entienda. No es ninguna cosa de otro mundo. Es sencillamente pedir el tiempo y el respeto para poder… Nada, vivir”.
“Te entiendo, pero la gente se pregunta ¿qué pasa con Benjamín? Queremos que vuelvan, los queremos bien, verlos felices. Sabes que la gente quiere esto”, contraatacó el notero. “Bueno, se agradece el respeto hacia mi trabajo y lo que somos, pero sabemos que eso tiene que ver con el mundo privado”, afirmó Vicuña.
Tras caminar unos pasos, el periodista se atrevió y le hizo una punzante pregunta: “Una más y te dejo ir, te juro ¿Están haciendo terapia de pareja o no?”. Benja se río y empezó a decir “sí, mira… Estamos, estamos…” Y justo apareció de improvisto la admiradora que le pidió la foto.
A Vicuña le cayó del cielo. “Me tengo que ir, amigo. Muchas gracias por todo”, se excusó el actor con el reportero que no disimuló su descontento con la mujer por funarle la entrevista. “¡Qué buena onda chicas! Justo cuando estaba por decir si estaba con la terapia familiar vienen y dicen ‘una foto’ ¡Cómo zafaste, Benjamín!”, concluyó el notero, molesto.
