El inspector Vallejo se quebró al desclasificar conmovedor asesinato de niñita
Habrá influido la lluvia, pero en el matinal de Chilevisión se pusieron súper nostálgicos. Cada uno de los panelistas habló de la relación que tiene con la muerte de un ser querido –MIRE AQUÍ EL VIDEO-.
Carola de Moras mencionó la pérdida de su padre y la tragedia aérea de Juan Fernández, en 2011, donde falleció Felipe Camiroaga y cuatro integrantes más del Buenos Días a Todos, que entonces ella animaba.
Rafa Araneda y Felipe Vidal también recordaron el deceso de su papá. Y el inspector José Miguel Vallejos se quebró en pantalla al relatar el caso de una niñita de siete años que fue envenenada por su padre:
“Hace muchos años yo trabajaba en una unidad rural en Rancagua. He trabajado en muchas partes. De pronto fuimos a ver a una niñita que fue envenenada por su padre. La niñita tenía seis, siete años de edad.
“El padre tenía problemas para las salidas dominicales que se tienen el día de hoy. La llevó al campo y, de tan desesperado que estaba, la envenenó y enseguida se envenenó él.
«Lo interesante es que, hablando después con la madre de la niña, ella dice que durante la semana siguiente su niña estuvo conversando con ella en la noche.
“Ella no sabía si estaba dormida, pero dice que en alguno (a Vallejos se le quiebra la voz)… Perdóneme, este es un tema que a cualquiera lo pone mal, no es a mí nomás… Hay momentos en que ella estaba durmiendo y despertaba y la niña la tenía en frente a ella conversándole.
“Le decía la niña: ‘Mamá, quédate tranquila, que soy feliz, ¡soy feliz!’. Y decía que vivió una energía esplendorosa, con su lenguaje de niña. Eso es, mi querida señora, lo que pasa. Perdón, discúlpeme (con lágrimas en los ojos).
“Es que uno tiene que ser responsable en la televisión, pero lo que quiero decir es que es absolutamente verdadero esto. No importa cómo lo muestren las religiones, el recado de fondo sigue siendo el mismo.
“Es una existencia real, que ni siquiera queremos indagar acerca de ella. Y cuando llega el momento, no sabemos cómo enfrentarla. Si indagáramos lo suficiente, estaríamos más tranquilos y estarían más tranquilos nuestros familiares.
“Que distinto es como enseña el budismo, el hinduismo, y uno le encuentra sentido a esto de que uno reencarna. Porque uno lo hace mal en un momento y debe forzosamente recuperar lo que uno no ha concretado. Y esta idea del budismo, de que vamos mejorando, y del hinduismo también, de ciclo en ciclo, tiene mucho fundamento.
“Resulta que somos tan imperfectos, que decididamente en el siglo que estamos viviendo, nos pasa a todos, incluyéndome a mí, por supuesto. Es tan simple como esto: Ser bueno. Un hombre bueno, una mujer buena”.
