Glamorama
"Yerko" aprovechó las lluvias para realizar su segunda rutina de la temporada de Vértigo de este año. FOTO: CANAL 13

Sin censura! La hilarante rutina de “Yerko” donde se burló del reality de Mega e ironizó con Uber

Autor: C. Z. / 15 abril, 2016

“Yerko Puchento” aprovechó las lluvias para hacer una hilarante rutina. El comediante, interpretado por el actor Daniel Alcaíno, tuvo su segunda aparición en esta temporada de Vértigo. Allí se burló del reality de Mega ¿Volverías Con Tu Ex?, e ironizó con la polémica entre Uber y los taxis, entre otras cosas. Mire parte de lo que dijo en el estelar de Canal 13:

“Yerko Puchento”: “¡Hola chicos! Los únicos hueones secos están aquí. ¡Los únicos! Está lloviendo. Quedó la cagá. ¡Se largó el temporal, chiquillos! ¡Está la escoba! Vamos a hacer la rutina bien cortita, hasta que se inunde el estudio, cabros. Viene bajando el agua por Santa María, y no es chiste. Te lo digo altiro a ti (Rafael Cavada), que te gusta el peligro. ¡Ah! ¡Pensé que era el ‘Tila’, hueón!

“Por primera vez en la historia de la humanidad y en la historia de Chile, desde Mateo y Toro Zambrano y la Primera Junta de Gobierno, la buena, todos los meteorólogos, incluso el hueón de siete, que no le achunta a ni una, ¡le achuntaron esta vez! ¡Fuerte el aplauso para los meteorólogos de Chile! Guatón, te quiero. Sensei. Lindo. Estupendo. ¡Qué rico, mi chinito! (Apunta a una cámara)

“Quedó la cagá en Chile. Al fin le achuntaron los meteorólogos. Durante años, nunca le habían achuntado a ni una. ¡A ni una! Cuando anuncian cielo despejado, llueve a cántaros al otro día. Anuncian un frente frío. ¡Y los patos caen asados después! En la mañana tení que salir con una mochila llena de hueás: Parka, trajes de baño, impermeables, calzoncillos. ¡Parecí ekeko, inmigrante en la calle! Ahí vai. Te pilla un alemán, te echa de una patada en la raja de aquí. Y eso es porque nunca, nunca dicen las cosas claras estos gallos. ‘Viene un frente ciclónico’, ‘vaguada costera’. ¿Alguien sabe qué chucha es la vaguada costera? ¡Cómo te vestí pah la vaguada costera, hueón! ‘Mamá, hay vaguada costera. ¿Voy con peto, con polerón, con mini?’. Nadie tiene idea como se viste. Por qué no hablan en chileno estos gallos de una vez por todas: ‘Mañana los patos caerán asados’, ‘va a llover más que la concha de la lora, y mañana nos inundamos hasta el cogote y cagamos todos’. Que hablen claro de una vez por todas.

“Y ahora, por primera vez le achuntaron todos, ¡todos! Todos pronosticaron un ‘Diana de mal tiempo’: Un frente de mal tiempo. Es lo mismo. Para que nos vayamos entendiendo. ¡Y va a quedar la cagá! ¡Y va a quedar la cagá! ¡Y va a quedar la cagá! ¡Prende la tele! Eso nomás estoy diciendo yo. ¡Estoy malo hoy día!

“Hoy día comenzó a quedar la cagá con el tiempo. Y a las once de la mañana empezó a llover en todo Santiago. Bueno, la verdad como a las cinco de la tarde. No, a las ocho. Ya, ya, a las ocho. Casi no estuvo en el libreto. ¡Y no es chiste! Empezó a llover en todo Santiago. En algunas partes llovía a cántaros. En una parte llovía menos fuerte. En algunas partes llovía a cántaros. En la casa de la ‘Geisha’, había solo llovizna, llovizna. En la casa de la Diana caían chubascos. Y en la casa de la Vivi (Kreutzberger) caían churrascos. Ella le echaba mayonesa, los recogía y ¡pun, pah adentro!

“¡Ya empezaron los tacos, Diana! ¿Y la más complicada con los tacos quién fue? La Diana con el tránsito lento. Siempre tiene problemas con el tránsito lento. Y todos los famosos se complicaron, desesperados con la lluvia. Haciendo arreglos de último minuto, Bombo (Fica). Corrían de acá, pal otro lado. Salfate tapando la plantita con un plástico, para que no se le mojaran los cogollos. Pobrecito. ¡Que los quiere más que los niños, Diana! Los cuida más que a los cabros chicos. A la Luli se le dio vuelta una canaleta arriba de la cabeza. Y se decoloró entera. ¡Volvió a ser rubia! ¡Y la cochinada que quedó abajo, hueón! Con todo lo que se había echado en la cabeza la pobre mujer. Era como un relave minero de agua oxigenada. Murieron como tres perritos que tomaron agua. Una nube tóxica alrededor de la cuestión.

“ME-O andaba desesperado comprando kilómetros de plástico para tapar el avión que tiene en el antejardín. Ahí lo trataba de tapar. Lo corría para acá, lo corría para acá ¡No había cómo tapar la cuestión! Se le veían las rueditas. A Hernán Larraín, con las arrugas que tiene en la cara el caballero, se le hicieron pozas en la cara. Era como el Amazonas. Corrían ríos, había grietas. ¡Hasta cascadas tenía el caballero! Dicen que lo van a incluir en el Turistel del próximo año al viejo ese. Quedó con la cara hecha bolsa. A Lucho Jara se le volvió a tapar el hoyo, ¡de la pera, por favor, señora! ¡Peladores!

“En Mega estaba preocupados, Ingrid (Cruz), porque si les llega a caer una gotera en la cabeza a la Paty Maldonado, deja el estudió del matinal convertido en Art Attack: rojo, morado, verde, azul, Calipso ¡Pah qué tantos colores te pones Paty en la cabeza! Si todos te recordamos en blanco y negro no más. ¡Malo! En el Congreso, ¿lo digo o no lo digo? (‘¡Sí!’, grita el público) En el Congreso estaban todos mojados ¡Pero mojaos, mojaos poh, hueón! Estaban estilando. Los tuvieron que colgar con un ‘perrito’, hueón, para secarlos, a todos.

“A ME-O se le decoloraron las canas, esas que le hace la Karen (Doggenweiler) todos los días, y quedó negro de nuevo. ¡Terrible lo que estaba pasando hoy día con la lluvia! En la primera campaña solidaria del Gobierno, la Bachelet le pidió a la ciudadanía que donara aserrín. Y la Luli fue a dejar un timbre, porque hace ‘ring’. ¡Qué lindo! ¡Qué tierna! ¡Qué amorosa! Un saludo para la Luli si me está viendo. Pero las lluvias siguieron cada vez más fuertes. A la Paty Maldonado le entró agua a la boca, ¡y tuvieron que hacer una represa adentro, para controlarla! Incluso el gobierno quiere hacer navegable esa hueá. Imagínense. Cabe de todo.

Reality de Mega

“En el reality de Mega llovía a cántaros, adentro de esa cuestión. Era como echar agua en un sartén, ¡pich!, saltaba la chispa. Era como mear una fogata, ¡pich!, saltaban los polvos. ¡Qué programa más picante que ese reality! ¿Sí o no? ¡Ultimo! ¿Sí o no? (‘¡Sí!’, grita el público) Están todos en leva esos gallos. ¿Qué les dan de desayuno? ¿Yumbina? No sé. ¡Es el único caso en el mundo donde incluso, sin lluvia, las minas andan mojadas dentro de la casa! ¡Es que se duchan todo el día! ¡Ingrid, por favor! ¡No sean cochinas! Ahí, dejando la huella del caracol todo el día ¡Ultimo! Ingrid, no pongas esa cara.

“A Jordi se le mojó la canoa hoy día. Pobrecito, hueón. A la pobre Vivi Kreutzberger le caía la gota gorda arreglando el techo la pobre. Ahí, arreglando. De repente se resbaló, tipo seis de la mañana, y fue temblor en toda la zona central. Eso fue lo que sintieron, por si acaso. Sí, por si acaso. Aclarando. El director de la Onemi estaba en short pensando que la lluvia llegaba el sábado, el saco de huea. ¡No, si en este país no hay un pan que rebanar! Longueira se resfrió. Sí, se resfrió Longueira. Y estuvo métale estornudo todo el día. ‘Ah, ¡Soquimich! Ah, ¡Soquimich! ¡Soquimich!’. Así estuvo todo el día. Pobrecito. Pobre.

En tribunales, tú (Cavada), que eres periodista. En tribunales estaba lleno de filtraciones por todas partes. Trataban de tapar una filtración por acá, y chucha, se filtraba otra por acá. Trataban de tapar otra que se filtraba por acá, y se filtraba otra por allá. ¡Todo filtrado! ¡Terrible! Todos los días se filtran cosas en los tribunales. En la U sacaron a todos los jugadores a la cancha, para ver si así mojaban la camiseta esos hueones. Esa la entendió Goldberg. La entendió.

“Todo Chile trataba de tapar su casa. Y Rafael Cavada tapaba la piscola afuera del Liguria para que no se le fuera a mojar. ¡No, te pasaste, Rafael! Esa es la verdad. Digámosle a la gente de una vez por todas. En la casa de la Jhendelyn no había cómo tapar el hoyo. ¡Era el medio forado que tenía en el techo! ¡Ingrid, que eres mal pensada! No había cómo taparlo, con nada. Fabricio, ustedes lo conocen, ini piñi. Bueno. Fabricio salió en pelota a la calle, y la gente lo usaba de puente para cruzar de vereda a vereda. ‘¡Súbase señora! ¡Pase ahí!’. Y la vieja haciendo equilibrio, ahí, derechito, derechito llegó. Y la otra vieja de vuelta. Diana, ¿querí cruzar?

Diana Bolocco: “Yo estoy muy bien atendida en mi casa, ‘Yerko’”.

“Yerko”: “¡Pero un puente así poh! (hace un gesto con los dedos). El puente del río Silala ¡Cristián ‘Silala’ Sánchez! ¡Ya!

Diana: “Pura envidia suya y del gordo (Jorge López), que está arriba”.

“Yerko”: “Julián Elfenbein y Viñuela tiraban agua con balde adentro de TVN. ‘¡Ojalá se inunde está hueá!’, decían. ‘¡Ojalá se inunde!’. Y después se fueron a dormir abajo del puente del Arzobispo, donde están viviendo ahora. ¡Pobrecitos! Están viviendo ahí. Pásalos a ver poh, Rafael. No seai malo.

“Esto es para ti, Goldberg ¿Lo digo o no lo digo? (‘¡Sí!’, grita el público) En la casa de Esteban Paredes cayeron truenos, rayos y visos. Me lo contó Meruane cuando estaba saliendo de aquí el otro día. ¡Oye! Al Negro Piñera le cayó agua en la boca y lo tuvieron que llevarlo de urgencia a la clínica. ¡El Negro Piñera! ¿Qué pasó? Ingrid, ¿qué pasó?”.

Ingrid Cruz: “Era malo lo del viso”

“Yerko”: “Es que a ti te gustan los de viso. Es que estaba la escoba. Al Negro Piñera le cayó agua en la boca. Lo tuvieron que llevar de urgencia a la clínica. Como siete lavados para sacarle el agua de adentro de la garganta. Le encontraron dos aros de la Belén y un colaless de la Carlita Ochoa adentro ¡Terrible! Un examen que fue muy doloroso. Al pobre Martín (Cárcamo), ¿adivinen? Le entró agua al bote. ¡Sí! No, ¡mal pensados! Un bote que se compró, Ingrid, para salir a navegar, a disfrutar de la vida, porque él se lo merece. Y chupar tranquilo adentro de esa hueá, para que no hueveen. Se lo merece.

“Todo Chile estaba preocupado hoy día, menos Lucho Gnecco, que se comió un ‘griego’ y se relajó, altiro, altiro. Inmediatamente quedó tranquilo. Y el único, ¡y en esto quiero ser categórico! El único que no se mojó, ¡el único en todo Chile que no se mojó!, fue Daniel Alcaíno, porque tiene tejado de vidrio. ¡Sí, ya lo dije! ¿Y qué? ¡Toma, cachito de goma! ¡Sí! ¡Picante! ¡Ultimo!

Diana Bolocco: “¿Tiene algo más que decir?”.

“Yerko”: “¡Prende la tele! Prende la tele”.

Polémica de Uber con los taxis

“Yerko”: “Hablando de leyes, donde sí está la cagá, y está la escoba, es en la pelea de los taxistas con Uber. ¡Se pasó esa cuestión! Están más peleados que Franco Simone con The Voice. ¡Así de peleados! De ese nivel. No se quieren ni ver. Están más peleados que la Pancha Merino con la Tonka. ¡Peleados, peleados a muerte! Y yo creo que los dos son buenos. Pero son distintos. Aclaremos. Y yo le voy a explicar las diferencias a la gente entre Uber y los taxis. Para que se la vayan imaginando, para que entiendan este problema:

“Benjamín Vicuña es Uber. Y el ‘Guatón de la Fruta’, un taxi. ¿Está claro? Para que más o menos se vayan a ubicar. Gustavo (Becerra), es solo un ejemplo, por si acaso. Te quiero. Benjamín es un Uber, y el ‘Guatón de la Fruta’, Gustavo, un taxi. Están súper participativos. Los cacho hoy día.

“La Luli de ahora es un… (‘¡Uber!’, grita el público) ¡Bien! Y La Luli de antes era un… (‘¡taxi!’, grita el público) ¡Bien! Era de esos taxis grandes, con maleta y harta culata. ¡Al fin Chile está entendiendo el problema del transporte de los taxis! ¡Ven!

“La siguiente, por favor, a ver. La Cecilia Bolocco es un… (‘¡Uber!’, grita el público) ¡Bien! Y la Diana es un… (‘¡taxi!’, grita el público) ¡Bien! Es un taxi. Si poh. ¡No! ¡No nos engañemos, por favor! Tení más de cien mil kilómetros. ¡Sí! Hay problemas de base.

Diana: “Me he hecho todas las revisiones”.

“Yerko”: “Te han pegado todas las revisiones, si. Se te están cayendo las culatas también”.

Diana: “¡Oye, mírame las culatas también!”.

“Yerko”: “No vengas a engañar a nadie. Taxi, taxi, taxi. ¡Ya, listo! Vamos por la siguiente. El ‘Polaco’ Goldberg es un… (‘¡Uber!’, grita el público) ¡Bien! Y Martín Cárcamo es un… (‘¡taxi!’, grita el público) ¡Bien! Martín, eres taxi. No tení freno y tení problemas con el embriague. ¡Sí, sí, sí! ¡ Taxi, taxi, taxi! No vengai aquí a vender la pomada.

“Siguiente, porque el pueblo de Chile ya está entendiendo. A ver. Rafael Cavada es un… (‘¡Uber!’, grita el público) ¡Bien! Y Santiago Pavlovic un… (‘¡taxi!’, grita el público) ¡Bien! Taxi pirata, pero bueno. Al fin de cuentas, taxi. ¡Oye, que son malos!

“Ok. Siguiente. Ganar la Copa Libertadores es un… (‘¡Uber!’, grita el público) ¡Bien! Y ganar la Sudamericana es un… (‘¡taxi!’, grita el público) ¡Me di un gustito, me di un gustito! Es un gustito que me quería dar yo.

“Me voy a dar otro gustito. A ti te digo, Juan Andrés. Tener el estadio, como el Monumental, es un… (‘¡Uber!’, grita el público) Y no tener estadio es un… (‘¡taxi!’, grita el público) Si, me di un gustito.

“A ver. Canal 13 es un… (‘¡Uber!’, grita el público) Y Chilevisión es un… (‘¡taxi!’, grita el público) ¡Bien! ¡Me entendieron! ¡Están aprendiendo!

“La Jueza es un… (‘¡Uber!’, grita el público) Y la doctora Polo es un… (‘¡taxi!’, grita el público) ¡Bien! ¡Muy bien! Ella es la original, la buena.

“’Yerko Puchento es un… (‘¡Uber!’, grita el público) Y Daniel Alcaíno es un… (‘¡taxi!’, grita el público) ¡Bien! ¡Súper bien!

Ahora lo bueno que tiene Uber, hay que reconocer que los dos tienen cosas buenas. Lo bueno que tiene Uber es el servicio. De verdad. El otro día me subí a un Uber, el chofer me dijo ‘¿quiere una botella de agua?’. ‘Sí, gracias’, le dije yo. ‘¿Y una pajita?’¡Puta el servicio bueno, hueón! ¡Llegué relajado! Llegué súper tranquilo ¡La cagó! ¡Eso es Uber!

Diana: “¡Pero cómo dice esa tontera! (ríe)”.

“Yerko”: “Pero si es verdad. Pidan su Uber y van a cachar. En cambio, el taxi también tiene lo suyo. Diana, ¿qué te pasa? Tomaste el mismo taxi que yo. Ya. Después te doy la patente y el número del chofer.

“Oye, pero los taxis, esos negros con amarillo arriba, tiene otra cosa romántica, republicana. Esa cosa nostálgica de los ochenta, que todavía los hacís parar con el dedo, pero el hueón sigue de largo. Y no para. O que dice libre arriba, en un letrero, pero va ocupado, igual que Martín. Dando señales falsas. Y uno ve de lejos a los taxis, negros por abajo y rubios por arriba, igual que Esteban Paredes. Igualito, igualito. Y cuando te ven, son capaces de cruzar hasta en quinta fila, mierda. Se cruzan, hueón, y casi dejan la cagá atrás. Y listo, paró. Y cuando abrís las puerta, sentí ese buqué entre pino y peo, hueón. ¡Uh! Ahí te subí feliz. Y tení que decidir en qué mancha te sentai. En al mancha de allá o en la mancha de acá. Listo. Te sentai. Y una vez que partís, te pasan La Cuarta, que viene toda pegoteada y húmeda, no sé por qué.

“Después le pedí si podí abrir la ventana. Y empezai, dando la vuelta, como moliendo café, como Juan Valdez moliendo café. Ahí está el hueón. Quedai con tendinitis antes de llegar a tu casa. Ahí. Y en la última vuelta, te quedai con la manilla en la mano. Y ahí te das cuenta que tu casa está pah allá. Pero el taxista va pah allá porque, según él, está cortando camino por San Bernardo para llegar a Vitacura. ¡Cáchate! Bueno. Pero hay que creer. Pero finalmente llegai feliz a tu casa, con un resorte incrustado en el culo, pero feliz. Pagai tres lucas con un billete de a diez, y no tiene vuelto pah darte. ¡Cagaste! ¡Esos son los taxis de los años ochenta!

“Yo les daría un consejo a mis amigos taxistas. ¿Cuál es mi cámara? Si el gobierno le cobra $12 millones por circular como taxi, ¡háganle una tremenda tapa al gobierno! ¡Vendan el Nissan del 93! ¡Pónganle seis palos arriba, se compran un auto nuevo, y se cambian todos a Uber, con plata en el bolsillo! ¡Sí, ya lo dije! ¿Y qué? ¡Toma, cachito de goma! ¡Llegó la hora de la modernidad!”.