Glamorama
Rafa Araneda reveló cómo eran sus Navidades cuando niño. IMAGEN TOMADA DE PANTALLA / CHV

La conmovedora historia navideña de Rafa Araneda: “Mi familia siempre vivió en la escasez”

Autor: C. Z. / 22 diciembre, 2017

Este viernes fue un especial navideño en todos los matinales de la TV. Cada uno enfocó sus pautas en el simbolismo de la celebración, entregaron regalos y revelaron emotivas historias.

En La Mañana de Chilevisión hablaron de la “Navidad más especial” de los animadores y panelistas del programa. Cada uno fue relatando su mejor recuerdo en torno a la fecha. Y cuando fue el turno de Rafael Araneda, el animador reveló una historia especial sobre sus Navidades cuando era un niño, en Ñuñoa.

Rafa aseguro que su familia “siempre vivió en la escasez”, teniendo navidades humildes y donde la mayor parte de los gastos de sus padres estaban destinados a su educación. Sin embargo, hubo una que lo marcó para siempre. Así lo relató en el matinal de CHV:

Rafa Araneda: “Era una casa chiquitita, pero genial. Una casa que nos permitió crecer a todos. Pero fíjate que las navidades de nosotros mi mamá siempre ha sido muy religiosa. Mi papá no lo era, pero lo acompañaba a todas. Y como el viejo al acompañaba, nos llevaba a todos nomás. Mucha misa, mucha ceremonia. Y uno con la ansiedad ‘¿hasta cuándo el rezo?’. Y al curita, que uno le tenía buena, al final le tenía mala.

“Y por otro lado con la escasez, porque siempre tuve conciencia de la escasez. Mi familia siempre vivió en la escasez, aunque muchos no me lo creen. En la escasez. Y donde educarse era todo. O sea, los padres ponían el billete ahí. Y no había nada. Y si digo nada, era la escasez. Pese a ello, yo notaba y percibía que de chico que se hacían esfuerzos sobrehumanos a la hora de, no sé, adquirir una deuda por un regalo, o para hacer una rica cena. Entonces siempre tuve esa percepción. Yo no sé por qué, pero siempre cachaba que esto llegaba por arte de magia”

Carola de Moras: “¿Pero cómo era tu día? Porque yo me acuerdo del día entero. ¿Tú cómo te acuerdas de tu día en Navidad?”

Araneda: “A ver. Íbamos a misa como a las 8, 9, y después llegábamos a la casa. Una comida familiar y el tema de los regalos. En otras oportunidades, y yo se la he contado a ustedes, a mí una Navidad que jamás se me va a borrar, por el tema de que el Viejo Pascuero me regaló una bicicleta. Y yo nunca pensé que la bicicleta era para mí, por la conciencia de la escasez. ¿Cómo yo? Mi papá siempre dijo que tenía muy mala relación con el Viejo Pascuero. Es más, mi padre pelaba al Viejo Pascuero. El hombre sufría porque no teníamos buena relación con el viejo.

“Entonces llegamos donde unos primos. A ellos les iba muy bien. Llegamos. Nos invitaron generosamente. Fuimos a esta comida y estábamos todos. A las 12 nos esconden a los niños. Y aparecen las bicicletas. Y había tres bicicletas. Una para los dos primos. ‘¿Y esa?’. ‘Esa es tuya’. Y yo ‘genial, genial’. Salimos a andar. Yo andaba un poquito. Nos dimos una vuelta. Y de repente, bueno, ya es tarde, nos vamos. Hay que irse. Y aquí viene mi emoción. Nos despedimos. ‘Chao’. Yo les pido la bicicleta, porque pensé que me la habían prestado. Y ahí me dicen ‘no, si es tuya’. Ahí me cayó el tejo.

“Y ahí al defendí. Me la trataron de robar unos pelusas en la esquina de la casa. Me pegaban en las manos. Pero la bicicleta la defendí como león. Me duró toda la vida. Después esa bicicleta la vendí en el campo. Ese momento, que jamás se me va a olvidar, es el reflejo de lo que fueron mis Navidades”.