«No podemos sentarnos frente a una cámara a tirar nuestra rabia, porque no nos corresponde…»: los argumentos de Luis Jara
Los rostros televisivos han manifestado su opinión frente a la crisis que vive el país. Muchos de ellos utilizaron sus redes sociales para dar un mensaje, hacer una reflexión o un llamado ante los hechos que han ocurrido.
Lucho Jara se expresó hace dos días a través de su Instagram. “Qué ganas de que la clase política pudiera enfrentar de una vez por todas esta crisis con autocrítica y humildad. Es lo único que debiéramos esperar”, escribió.
Y este miércoles habló Mucho Gusto.
El tema en el matinal de Mega eran las críticas que han recibido por no mostrar todos los videos con denuncias ciudadanas. En ese contexto, el conductor dijo:
“Estaba pensando un poco, cuando se genera esta conversación, un poco lo que decía Andrea (Arístegui), confirmando que hay que aprender a recibir las críticas. Me parece que es de sentido común aprender a recibirlas. Los que trabajamos de comunicadores sabemos que estamos expuestos al escrutinio público. Yo creo que eso es una causa que no escapa a ninguno de nosotros.
“Y me parece que hay que sacar el tema de la violencia. Yo creo que la violencia nos violenta a todos nosotros. Nos pasa algo cuando nos tiran algo que nos parece injusto.
“Fíjate que ayer a mí me pasaba algo. Yo fui formado en la televisión ochentera, donde no se podía decir todo lo que uno quería. Los muchos de acá que tenemos mi edad teníamos miedo, fuimos formados con el miedo, crecimos con miedo, nos vendaron los ojos. A mí me daba mucha rabia. O sea, yo tengo ganas de ir a marchar, tengo ganas de decir lo que pienso, tengo ganas de oponerme a un sistema perverso.
“Pero evidentemente que muchas veces los comunicadores estamos sujetos a muchas cosas. Y no podemos sentarnos frente a una cámara a tirar nuestra rabia, porque no nos corresponde. Lo que nos corresponde es empatizar con lo que la gente está sintiendo en su casa. Pero también me ha pasado de preguntarme cuán cobarde soy como comunicador, en el sentido que mucha gente exige que nos mojemos el potito.
“¿Dónde está el límite? Yo digo, honestamente, que estoy en un aprendizaje de hacerlo, porque Chile nos está pidiendo, como comunicadores, que entendamos el cambio. Yo no me quiero justificar ante la audiencia de decir ‘mira, es que tú no lo haces’ porque no tenemos que hablar de cada uno de nosotros.
“Pero efectivamente, en mi caso personal, como muchos otros comunicadores, es hacer una televisión distinta. Hoy día nos tenemos que adaptar. Y también la sociedad tiene que cambiar. Creo que la violencia no debe estar implícita en el discurso y en la crítica.
“Creo que son cosas de sentido común y agradezco que, en esta oportunidad, los represente un poco a ustedes. Pero lo digo desde lo más profundo de mi corazón”.
