“Sé que me falta un poco hacer lobby. En la tele todos hacen lobby y yo no sirvo para hacer lobby»,  manifestó Daniela Castro.

La cocinera de 32 años que ganó la primera temporada de MasterChef Chile entregó su punto de vista sobre el mundo de la televisión.

En 2017 Castro se integró al matinal Mucho Gusto, programa del que salió tras casi un año en pantalla.

La influencer de Instagram se contactó con El Aperitivo, el programa que se transmite en vivo por el instagram de Velvet.

Estas fueron parte de sus palabras sobre su mirada a la industria televisiva:

Daniela Castro: “A mí famosilandia me… Es brígido. No me interesa ser políticamente correcta.

“También sé que me falta un poco hacer lobby. En la tele todos hacen lobby y yo no sirvo para hacer lobby. Y todos se van a enterar que no funciono. ¿Por qué? Si a mi me contratan por lo que puedo hacer, no por si es simpático o va a almorzar con el jefe o no.

“Hay harta gente preguntando ‘¿qué es lo lobby?’, lobby es como… Que no tiene que ver tu talento ni con tus capacidades, tiene que ver solamente con amiguismos, con llevarte bien, con saludar amorosamente a los que quieres saludar y con saber con quien juntarte y con quien no.

“Yo voy a un evento y no pesco a nadie. Yo voy a hacer mi pega y vuelvo. Yo no hablo con más gente, porque yo no quiero.

“Cuando renuncié a Mucho Gusto hablé con uno de los productores y le dije ‘estoy chata de tener que pelear la palabra’. Porque todos son súper amigos en comerciales, pero prenden la cuestión y tú dices ‘se supone que había buena onda y no me deja hablar’.

“Y me dijo ‘Dani, esto es un circo y vas a tener que empezar a ser así si es que quieres que te vaya bien en la tele’.

«Yo le dije ‘es que no me gusta ser así. Me puede ir bien de otra manera, si me ha ido bien en pocos años’. Todo tiene que ver con cuanto uno aporte, no con cuanto sale en la tele y cuanto no, sino con cuan genuino eres. Creo yo que ese es el éxito.

“Me dijeron eso y me dijeron ‘vas a tener que…’, y me hacían el gesto (de pegar codazos). ‘Vas a tener que ser más zorra’. Es brígido, porque me están diciendo en la cara que no sirvo para esto porque no soy así, brígida. No porque no tenga talento, sino porque no soy del circo”.