«(Cristián Campos) Decía que la Raffaella era una loca, que es ninfómana. Después comenzó a hablar de mi mamá (Claudia di Girolamo) de la misma manera»: el testimonio de Pedro Campos
«Decía que la Rafa era una loca, que es ninfómana. Después comenzó a hablar de mi mamá de la misma manera, diciendo que esto era una vendetta, que era un odio parido», afirma Pedro Campos, el hijo menor de Cristián Campos y Claudia di Girolamo en parte de su testimonio en el caso Campos.
Raffaella di Girolamo, «la Rafa», es la hija mayor de Claudia di Girolamo. Su padre, el primer marido de la actriz de La Fiera y Iorana, es el artista Ismael Frigerio. Luego Claudia mantuvo una relación de años con Cristián Campos, de la cual nacieron los actores Antonio y Pedro. Este último es figura del área dramática de Mega, donde protagoniza el remake de Amores de Mercado.
En marzo pasado la Fundación para la Confianza interpuso una querella contra Cristián Campos por presunto abuso sexual infantil contra Raffaella. La familia se dividió. Claudia y sus dos hijos defendieron a Raffaella y cancelaron a Cristián.
Ahora, cuando la investigación se había cerrado y Campos sería sobreseído, La Tercera filtró el testimonio de la periodista Verónica Neumann, madre del actor Simón Pesutic. Neumann aseguró ante la justicia que, cuando Pedro Campos se enteró que ella declararía a favor de Cristián, «llamó a mi hijo Simón, amenazándolo. Le dijo que, si yo declaraba, su madre, Claudia di Girolamo, se encargaría de acabar con su carrera».
Sin embargo, Simón desmintió a su mamá y negó que Pedro lo haya amenazado. Por eso el juez reabrió la investigación. De manera paralela, Canal 13 filtró parte del testimonio que Pedro Campos realizó en tribunales:
“Le pregunté a mi madre si, cuando ella encontró desnudo a mi padre en la cama de Raffaella, fue el motivo de la separación. Y ella señaló que en ese momento la relación murió.
«Yo estaba desbordado, mi mamá me consolaba. Después llegó hasta la pieza Antonio. Recuerdo que estábamos sentados en el suelo y, cuando llegó mi hermana Raffaella a la pieza, con Antonio la abrazamos y le dijimos que le creíamos.
“Lo único que le dije es que, si a la Raffaella le pasaba algo o se hacía algo, yo no se lo perdonaría. Mi papá al escuchar eso dijo ‘la Rafa’ con un tono despectivo. Después comenzó con una verborrea despectiva para referirse a la Raffaella. Decía que la Rafa era una loca, que es ninfómana. Después comenzó a hablar de mi mamá de la misma manera, diciendo que esto era una vendetta, que era un odio parido.
“Él mostró una cara y una personalidad distinta a la que había visto de él. Yo soy muy sensible y me encontraba ya muy agotado con la discusión, y él dio como una advertencia o amenaza, así lo tomé yo por lo menos. Nos dijo que, si nos quedábamos del lado de la Raffaella, a él no se le olvidaría. Que si esto se hacía público y la Raffaella lo denunciaba, a él se lo cagarían.
“Durante la discusión nosotros exigimos respuestas y después de un momento mi padre le dice a Antonio ‘ya. Ensayemos’. Antonio le dijo que estaba loco, que ya no realizarían la obra. El comenzó a discutir con Antonio por la obra, le dijo ‘esto no se hace, eres un traidor’. A mí me dijo ‘chao Pedro’, y se fue. Cuando él salió del portón yo me largué a llorar y Antonio me abrazó. Llegamos a la conclusión de que esto era real”.