«Si me tuvieran que hacer una segunda radiación, yo ya simplemente no me la hago…»: el sensible relato de Adriana Barrientos sobre tumor en sus cuerdas vocales
Hoy Adriana Barrientos ocupa titulares porque pasó la noche detenida tras un confuso incidente, por el cual será formalizada por lesiones leves contra una vecina. Pero esta misma semana se conoció un aspecto más privado y sensible que afecta a la modelo: el tumor que le detectaron en las cuerdas vocales.
Primero se supo de ello en abril pasado, cuando la «leona» lo contó en sus redes sociales. Y ahora, en No Culpes a la Noche, relató el complicado proceso que vino después. Estas fueron parte de sus palabras en el late de TVN:
Adriana Barrientos: “Ese es un tema súper complicado. El año pasado fui al fonoaudiólogo. Uno siempre llega por otras cosas… Llegué porque me tenían que sacar las amígdalas. Cuando estaba en la operación me ven las amígdalas y se dan cuenta que mis cuerdas vocales no están bien. Que tienen una pelotita más o menos grande. Esa pelotita se llama tumor.
“Se supone, cuando me operaron, que la pelotita estaba todo bien, que se había hecho la biopsia y todo y que no iba a crecer más. Y este año, como para mi cumpleaños más o menos, me di cuenta que me empezó a doler mucho la garganta.
“Hablaba fuerte, por ejemplo, y me dolía la garganta. Muy delicado. Me fui a ver al médico y lamentablemente la pelotita había crecido. No lo conté en ningún lado porque me dio como lata. Pero fue súper complicado, porque de la noche a la mañana me dijeron que me tenían que hacer una radiación.
“Una radiación significa que se te cae el pelo, que se te pueden caer los dientes, súper invasivo. Con la radiación los dientes no se me cayeron, pero me salieron algunas caries. No lo podía creer. Fue hace como dos semanas al dentista por otra cosa y me dice que tengo caries. La radiación bajó tantos mis defensas que llegué a ese punto.
«Cuando me dicen que tengo un tumor como que dije ‘bueno, estas cosas pasan’, y uno no les toma el peso. Cuando me hicieron la radiación y tuve que llamar a mi amigo, a Pablito, que además es peluquero.
«Lo llamo y le digo ‘Pablito, me están haciendo la radiación y se me están cayendo los pelos, las mechitas que están con extensiones. Se me resbalan y se me están cayendo. Y yo ‘Pablito, no podría soportar verme peladita. ¿Qué podemos hacer?’.
«Me sacó las extensiones con mucho cuidado para que no se me cayera el poco pelo que me quedaba. Y yo dije ‘¿cómo lo enfrento?’. Nunca he sido de las personas que… Siempre me las he bancado sola y no tenía ganas de alarmar a nadie. No sé, quizás si le hubiese comentado en su minuto a mi mamá… No quise alarmar a nadie”
Cristián Sánchez: “¿Te dio susto?”
Barrientos: “Sí. (Se emociona) ¡Ay! Perdón. Me acuerdo que Pablito estaba en ese momento en Curicó y me dijo ‘espérame. Por favor no te toques el pelo’. Llegó y me sacó todas las mechas y me dice ‘ya, bien digna. Lo que vamos a hacer,es que aquí hubo un cambio de look. Además, las melenas están totales’.
“’En ese minuto estaba en un programa que era de cable y yo dije ‘no puedo llegar mal’. Además, soy rostro de una marca de jeans desde hace muchos años. ‘No puedo llegar mal, yo soy el rostro de la marca, seguimos haciendo fotos y yo necesito la plata más que nunca. Necesito trabajar’.
“Y no solo por el tema económico, sino por un tema que uno se levanta en la mañana y la única preocupación en tu día no puede ser ¿cómo pasar el día?, ¿me dolerá la garganta?, ¿cuándo me va a tocar que el doctor me vuelva a ver?, ¿me van a hacer una radiación de nuevo o no?. Yo quiero mantener mi cabeza ocupada, más ahora, más que nunca.
“El doctor fue súper claro conmigo. Si ellos me sacan esto, esto va a volver a salir, la protuberancia. Es irreversible. Porque yo no sé ocupar bien mis cuerdas vocales, por eso que tengo mis voz chillona y todo. Yo escucho mi voz antes y la voz de hoy y ha cambiado, es distinta.
«Pero es distinta porque estoy con tratamiento con fonoaudiólogo para aprender a ocupar mis cuerdas vocales. Me dieron seis sesiones de fonoaudiólogo. Hice veinte y no me pude recuperar. Sí, he ido evolucionando, pero es una batalla que cuesta mucho darla
“Pregunté por el tema de la radiación, que fue súper agresivo para mí. Y, por ejemplo, si a mí me tuvieran que hacer una segunda radiación, yo ya simplemente no me la hago. Porque no estoy dispuesta a pasar por algo tan heavy, tan complicado.
“Además, pregunté ‘¿hay riesgo de que una persona se muera por esto?’. Y no. Ninguna persona se ha muerto por tener esto. En mí, no sé cuanto pueda llegar a crecer y no quiero saberlo.
“Prefiero quedarme con esto de hoy, que me irradiaron, quedó un poquito más grande pero no ha continuado creciendo. Tampoco disminuido, pero no ha continuado su crecimiento. Entonces, mientras esta pelota no vuelva a crecer, yo tampoco quiero averiguar ni saber nada. Ni ponerme en casos hipotéticos, porque tampoco estoy dispuesta a sufrir más por lo que pueda pasar que por lo que ya pasó” –AQUI EL VIDEO. MINUTO 38-.