Glamorama
Hernán Calderón Argandoña en una imagen publicada a principio de octubre por el sitio biobiochile.cl

No tiene acceso a televisión, leyó tres libros y le cuenta su vida al gendarme: así son los días de Nano Calderón Argandoña en la cárcel

Autor: Cristián Farías Ravanal / 24 octubre, 2020

Los gendarmes son ahora la gran compañía de Nano Calderón Argandoña en la celda donde pasa sus días en Santiago 1. Con ellos conversa y les cuenta sus historias y su vida.

El hijo de 23 años de Raquel Argandoña y Hernán Calderón cumple con la medida cautelar de 120 días de arresto en el centro penitenciario en Centenario, tras el Centro de Justicia y a medio kilómetro de las instalaciones de los canales Chilevisión y CNN.

La prisión preventiva fue dictada a fines de agosto luego de que el ex estudiante de Derecho fue formalizado por parricidio frustrado.

El joven habita una pieza abierta con ventanas al pasillo del recinto que reúne a 4700 presos. La habitación no tiene vista al exterior y allí Calderón-Argandoña no tiene contacto con otros reclusos y es custodiado durante las 24 horas por un gendarme.

Su alimentación, en la misma pieza, es la comida otorgada por la unidad penal y alguna golosina que le lleva su defensa. El recluso no tiene acceso a televisión y para entretenerse tiene tres libros que ya leyó.

Fuentes del caso informan a este sitio que su mayor pasatiempo es conversar con el gendarme de turno asignado a su custodia. El turno cambia a la 8 AM, hora en que el interno se ducha.

Con sus custodios el hermano de Kel Calderón se desahoga. Les habla de diferentes acontecimientos de sus 23 años de vida. Tiene muy buena onda con ellos y con los funcionarios de Santiago 1. Se ha manifestado contento por el trato, cosa que no olvidará. Ha dicho que, una vez que abandone la cárcel, los llamará para saludarlos y agradecerles.

En el recinto hay una buena impresión del chico y afirman que tiene buena conducta.

Nano Calderón también habla con su abogada, quien lo visita regularmente. Un integrante de su defensa que lo fue a ver además aprovechó de cortarle el pelo.

El ánimo del hijo de Argandoña, en tanto, ha estado dominado por la ansiedad de salir pronto de Santiago 1. Su esperanza, dicen quienes han tenido contacto con él, es que lo antes posible pueda seguir cumpliendo el arresto domiciliario en la casa de su madre, su gran e incondicional defensora en el caso que se transformó en agenda para matinales, noticieros y medios de comunicación en general.