El exorcismo en la casa de Benjamín Vicuña: «Se nos abrían las llaves del baño, de la cocina. Escuchábamos pasos. Sentíamos que nos observaban…»
«Etapa de padre en una casa nueva y empezamos a tener presencias por todas partes», comienza relatando Benjamín Vicuña sobre el exorcismo que realizó hace un tiempo en una casa que arrendó en Chile y en la que vivió con su familia cuando uno de sus hijos estaba recién nacido.
Esta es la historia que contó el actor de 44 años en Podemos Hablar:
«Se nos abrían las llaves del baño, de la cocina. Escuchábamos pasos. Sentíamos que nos observaban. Había fantasmas en la casa y no sabíamos qué hacer. Después me iba al trabajo y ‘casa’ llamando, ‘casa’ llamando… Contestaba y no contestaba nadie. Esto se empezó a cargar y hablé con muchas personas, porque es como abrir un umbral.
«Yo soy lo más escéptico que hay. No me interesa contactarme ni que me vengan a buscar. Era un espíritu invasor en mi casa cuando yo tenía una guagüita recién nacida. Tenía miedo. Cuando sientes que se te paran los pelos en la espalda. Mala onda. Además los llamados por teléfono.
«Hasta que me llamaron de Los Andes para hacer un evento solidario y conocí a un cura que hacía exorcismos. Dije ‘listo. Ya está’. Un tipo del Vaticano, con un maletín, con cosas. El había estudiado esta cuestión. Se ofrece a ir a mi casa.
«Armé un equipo. Invité a mi hermana que hace feng shui, a mi papá que era un vaquero que no creía en nada, el cura y yo. Primero me hizo cortar unas flores, matas, las empezó a bendecir, les puso agua y fuimos por toda la casa. Fuimos recorriendo por todas partes la casa vacía. Yo ya veía que me aparecía un fantasma.
«Termina el señor, me dice ‘no me encontré con nada, pero te recomiendo que te cambies de casa’.
«Era una casa arrendada. Llamé al dueño, le dije ‘está todo bien, pero necesito que me digas si pasó algo en esta casa’. Era una casa que tenía 20 años, tampoco era del siglo pasado. Nada. Nunca supimos qué fue lo que pasó, por qué nos pasó. Yo vi sombras, todo lo que puedes ver y sentir, sobre todo más sentir.
«La gente que tiene experiencia con esto dice que sientes que te están observando. Es algo sensorial De repente que te abrazan. No es magia negra, son cosas sensoriales, paranormales. Me pasó en España lo mismo, sentir ruidos, cosas y sentir esto que se te ponen arriba, que te abrazan.
«Es loco porque son experiencias que le suceden a personas como yo, que somos escépticos. Es una situación de mucho estrés, porque va ligado a un cansancio, duermes mal, te empieza a ir mal en la pega».
