Matías Oviedo cuenta por qué los actores y actrices prefieren pololear entre ellos
Relaciones entre colegas existen en todos los ámbitos, pero entre actores son más llamativas. Primero en el teatro, luego en cine, Hollywood y la televisión. Desde el bombástico affaire de Elizabeth Taylor y Richard Burton en el det de Cleopatra, en 1962, al de Matías Oviedo y Camila Hirane, tras las grabaciones de la teleserie Esa No Soy Yo, de TVN, hace poco más de un año.
Ahora la pareja vuelve a compartir set, en Verdades Ocultas, que Mega estrenó ayer –VEA AQUI EL PRIMER CAPITULO-. Matías además, antes pololeó con otra actriz, Juanita Ringeling. Y en esta conversación durante la presentación de la nueva vespertina del canal de Vicuña Mackenna, que se realizó hace unas semanas, cuenta por qué se da esta atracción entre gente del mundo actoral:
Glamorama: Vuelve a hacer una teleserie con su polola.
Matías Oviedo: “Siempre es grato. Y aparte que a mí me gusta trabajar con gente que uno conoce y que tiene confianza. En ese sentido nos llevamos súper bien en el set. Tenemos onda y para mí es un agrado”
¿No es complicado?
“No, porque nos conocemos, sabemos cómo es la otra persona. Para mí es más positivo que negativo”
¿Cuánto tiempo llevan juntos?
“Será un año, casi”
¿Cuándo comenzó?
“Fue después de la teleserie. Grabé la teleserie y como que después nos hicimos amigos y nos juntamos. En Esa No Soy Yo como que recién nos empezamos a conocer. Así que nada. Son las coincidencias de la vida que nos vuelva a tocar acá. Yo las tomo como señales positivas. Te va juntando el universo”
Siempre se habla que los actores solo se relacionan con personas del mismo gremio.
“Uno trabaja muchas horas al día juntos, tienes los mismos intereses. Yo creo que también pasa en otras profesiones, otros oficios que, cuando las personas tienen los mismos intereses, los mismos gustos o cosas similares, tienden a juntarse. Por ejemplo los doctores. Es bastante natural que suceda”
¿No es que los actores quieran estar solo con actores?
“No, no creo. Pero a veces uno tiene horarios bastante extraños. A veces es más fácil que una actriz o un actor te comprenda más que otra persona que cumple otros horarios y cosas más rígidas. Cosas como que uno tiene que trabajar los fines de semana, viajar, no lo va a comprender. Pero en general creo que es algo que es natural para cada profesión. Los deportistas a veces se enamoran de las mismas deportistas. No creo que sea algo predeterminado, ‘yo quiero estar con una actriz porque soy actor’. No».