Glamorama
Imágenes tomadas de la pantalla de la historia de Instagram @galadrielcaldirola donde muestra sus días en cuarentena en Turquía.

Gala Caldirola se reconcilió con Mauricio «Huaso» Isla, regresó a Turquía con su hija y pasan juntos cuarentena obligatoria de ingreso al país

Autor: C. F. R. / 13 abril, 2020

Apenas bajó del avión en Turquía Gala Caldirola y su hija Luz Elif, de dos años, debieron encerrarse en un edificio acondicionado para que los extranjeros que llegan al país pasen una cuarentena de 14 días debido al coronavirus. Llevaban cuatro días en el recinto y se les sumó Mauricio «Huaso» Isla, marido de la modelo.

Así lo cuenta Caldirola en las historias de su Instagram.

La ex integrante de Bailando por un Sueño arribó en Chile en febrero para participar en el estelar que solo estuvo al aire durante tres semanas y fue cancelado debido a la pandemia.

Por esos días Glamorama informó sobre la crisis matrimonial que vivían Caldirola y el futbolista del club turco Fenerbahce. Posteriormente ella lo reconoció en pantalla. 

En tanto, la semana pasada, estando aún en Santiago, la figura televisiva de 27 años publicó el siguiente posteo:

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El amor en su plenitud te hace más humano, más paciente, mas comprensivo, más tolerante, más empático….Te hace ver que la felicidad no es solo hacer lo que a uno mismo le gusta, también es hacer lo que a tu pareja le entusiasma! Hay algo más lindo que ver sonreír a la persona que amas y saber que es gracias ti? El amor…Cuando lo tenemos a veces olvidamos lo difícil que fue encontrarlo! Se proyecta, se trabaja, se construye y en ocasiones hay que hacer modificaciones. Incluso habrán momentos en los que pensaras en dejar el proyecto a un lado antes de terminarlo, pero entonces recuerdas las palabras mágicas “comprensión y paciencia” y de repente todo vuelve a fluir y no hace falta planear cambios por que se dan solos. La vida te guía… Tic tac…Nos vemos muy pronto!✨

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Luego viajó a Turquía junto a su hija Luz Elif para regresar a su hogar junto a su esposo.

En una reciente historia, Caldirola cuenta como fue el arribo:

«No estamos en casa. Nunca nos dejaron llegar a casa. Llegamos y nos llevaron directamente presas a una especie de refugio.

«Es una especie de universidad antigua que han adaptado las aulas para que las personas que vienen del extranjero hagan cuarentena.

«Llevamos cuatro días aquí y nos quedan diez días más. Si no hay ningún tipo de síntoma o posibilidad de que tengamos el virus nos podemos ir a casita.

«Pero estamos muy contentas, porque hemos estado solitas estos días, pero movimos cielo y tierra hasta conseguir que dejaran venir el papá.

«Y el papá está aquí con nosotras haciendo cuarentena, así es que no estamos solitas. Y de momento cero síntomas. Estamos perfectas».