«Lo agarro y lo saqué (del restaurante) y le digo ‘¿te gustó herirme? ¡¿Te gustó?!’. Y ¡fá!, le rajo la camisa…», cuenta Antonella Ríos sobre funa a ex pareja que le fue infiel
“Yo no sé qué pasa que la gloria divina hace que yo llegue al lugar exacto. No sé si soy bruja, vidente o médium. A un pololo mío, igual fue fuerte, porque lo dejé en vergüenza frente a mucha gente en la Piccola Italia. Hice el medio show».
Con estas palabras partió el testimonio de Antonella Ríos en Me Late Prime sobre la funa que realizó a una ex pareja de quien no entregó detalles de identificación ni en que época sucedió.
La actriz de 47 años afirmó que este ex pololo le fue infiel. Dijo «él me humilló mucho, demasiado».
Este fue su relato en el programa en el canal TV+:
“Me junté con la ex. A mí me había pateado, me llama la ex y me cuenta que mientras estaba conmigo también estaba con ella. Yo le dije ‘¿ah, sí?’. ‘Sí’. Agarramos, fuimos a buscarlo las dos, con un pisco sour, a ella le tenía un teléfono que me había dicho a mí que se lo había comprado. Pues no, se lo había sacado a ella.
“Entra ella. ‘Oye, el teléfono’ y la cuestión. Después entro yo. Tengo un video que me grabaron y todo. Entonces estaban ahí comiendo fideos con un amigo y le digo ‘¿cómo está la comida?’. Así como película. Y seguía comiendo, estaba estresado conmigo, y el garzón dice ‘no pueden…’ Día domingo, familia y yo show.
“Le digo ‘¡ya, párate! ¡Párate!’. Yo cuando me enojo me enojo. Es que me había engañado poh, estaba dolida. La otra me decía ‘no. Para Antonella’. ‘No, nada de ‘para’, si tú ya dijiste que hagamos esto lo hacemos hasta el final’. Y la otra ‘no, bájale un poco, Te va a cachar la gente, la prensa va a llegar’. Ella solo quería su teléfono y yo quería venganza.
“Yo no soy loca, pero este tipo me trató mal poh. Yo no soy loca, él sacó lo peor de mí.
“Después lo agarro. A él le gustaba mucho la ropa, el look. Lo agarró y lo llevé, lo saqué y le digo ‘¿te gustó webiarme? ¿Te gustó herirme? ¡¿Te gustó?!’. Y yo soy intensa, llorando, gritando, con ira. Y le digo ‘ah, ¿te gusta tu ropita?’. Y ¡fá!, le rajo la camisa.
“El gallo indigno, con la cuestión rota, se va corriendo por Alameda, frente a La Moneda, y yo le digo ‘¡ven para acá!’. Y no venía y grito ‘¡me robaron!’. Todos miraron. Él volvió a donde estaba yo y ¡tá! y show. Fue show. No lo agredí a él, pero lo humillé un poco. Lo agredí verbalmente.
“Lo que pasa es que la historia es una historia donde él me trató muy mal durante toda la relación. Él me humilló mucho, demasiado, entonces yo tenía todo ese Kino, como la línea de crédito acumulada y fue mi dulce venganza. Después de eso recién pude soltar. Yo no lo recomiendo, pero después de eso recién pude soltar toda la pena y toda la rabia”.