Glamorama
Felipe Izquierdo y su esposa Paula Pérez en en un evento en 2008, en una foto publicada por yofui.com

Martín Cárcamo: «¿Cuánto tiempo estuviste dividido con tu señora (durante las cuarentenas)?». Felipe Izquierdo: «Como un año y algo más…»

Autor: C. Z. / 23 noviembre, 2021

“Yo, antes de que se declarara la pandemia oficialmente, vislumbré de que esto era en serio. Entonces conversé con mi señora. Tengo momentos donde converso con ella. Y le dije ‘mira, esto va más o menos en serio. Lo que te propongo es que nos dividamos, no que nos separemos, sino que nos dividamos’, que es una pequeña diferencia».

Este es parte del relato de Felipe Izquierdo sobre cómo vivió más de un año de cuarentenas ‘dividido’, como afirma, de su esposa Paula Pérez y junto a dos de sus cuatro hijos.

El comediante de 57 años contó la historia en Los 5 Mandamientos, espacio que Martín Cárcamo conduce en Canal 13, y así continuaron sus palabras:

“Le dije que me iba a Narnia, que es este lugar especial, un lugar retirado, y que me iba a llevar a los dos hijos hombres, uno que le gusta mucho el tema del campo, y el otro es bueno para la fiesta”

Martín Cárcamo: “Qué difícil hacer esa combinación”

Felipe Izquierdo: “Al bueno para la fiesta tenía que sacarlo porque iba a contagiar a todo el mundo y era un peligro. A él no lo convencí, sino que lo llevé a una actuación, y después de la actuación le dije ‘te voy a llevar a un lugar’. ‘No, espérate…’ Y nos fuimos por la carretera. ‘¿Pá dónde me llevai?’. A veces en el camino me decía ‘¡me bajo!’, y yo desesperado, porque era de noche. ‘¿Dónde me llevai?’. ‘Tranquilo, yo te explico’.

“Nos fuimos alegando todo el rato hasta que llegamos a este lugar. Mi hijo ‘¿por qué me trajiste acá?’. ‘No. Mañana te explico. Duerme’. Pasaron varios días hasta que declararon la pandemia. Y cuando declararon la pandemia dije ‘qué bueno, nos encontró acá’. Llevé comida, un montón de cosas, harta quinoa.

“Y de repente él ve en la televisión a Donald Trump que empieza a hablar sobre la pandemia. Se declara en el mundo. Le dije ‘mira, está hablando Donald Trump, no es un invento mío’. Porque hasta ese minuto él pensaba que era un invento mío. Le dije ‘mira, está Donald Trump’. Y me dijo ‘te apuesto que lo contrataste, tú eres capaz’, y seguía alegando. Claro, él pensaba que todo esto era una invención y que yo estaba como…”

Cárcamo: “Y tú dividido con tu mujer”

Izquierdo: “Sí, pero sanamente. No era sano mentalmente estar achoclonados. Achoclonarse un año seis meses no es normal. Cuando uno se casa dice ‘para toda la vida’, pero dosificado. Uno no se casa… Lo digo por ella, no por mí. Yo con ella estaría toda la vida, pero es distinto cuando estás en un departamento, una casa, un lugar cerrado”

Nicolás Larraín, invitado al mismo capítulo del programa: «Es que Felipe tiene su carácter. Entonces estar con Felipe 24/7, entiendo lo que está hablando. No sé si toda la gente entiende”

Izquierdo: “Yo hablo por mí. No sé el resto”

Cárcamo: “¿Pero cuánto tiempo estuviste dividido con tu señora?”

Izquierdo: “Estuve como un año y algo más”

Cárcamo: “¡¿Qué?!”

Izquierdo: “Sí”

Cárcamo: “Un año”

Izquierdo: “Claro. Nos veíamos porque cuando fueron abriendo las etapas venía a trabajar, nos encontramos y era muy divertido. Eran como encuentros de dos personas extrañas. Pero fíjate que fue súper inteligente. A mucha gente que le he planteado esto, conversado, me ha dicho ‘puta que fuiste…’”

Larraín: “Habiloso”

Cárcamo: “¿Y estuviste encerrado con tus hijos, los dos?”

Izquierdo: “Sí, pero estábamos en un lugar abierto. Teníamos un rango de movimiento donde era más fácil de llevar. La verdad es que fue muy sano y les sirvió mucho a mis hijos, porque nos encontramos en una intimidad, una situación de sobrevivencia en donde nacen las personalidades.

“Mi hijo menor es súper autodidacta. Un tipo que es capaz de comer raíces, solucionar problemas eléctricos, hacer todo. El otro es pura diversión, que es Felipe, y yo tratando de combinar todo esto”

Larraín: “Yo, con siete hijos, ya quisiera darles raíces”

Izquierdo: “Sembramos papas. Tuve que ir a buscar una yegua. Lo hice a la antigua. Y le tomé pulso a las cosas simples. Y de alguna manera me ayudó mucho.

“Para mí esta cuarentena, para no hablar de la pandemia, me ayudó mucho para crecer un poco en términos integrales, porque intelectualmente leí mucho, mi cruzada por tener un poquito más de cosas en la cabeza, pero me enamoré un poco de este fenómeno”.