«Di toda mi vida por este matrimonio. Dejé muchos proyectos. Iba a ser la animadora de Yingo, en vez de la Cata Palacios… Siempre lo puse a él primero que a mí. Y ahora no», afirma Daniela Aránguiz separada
«Si un hombre mira para el lado es porque él tiene problemas, no por algo que uno tiene una falencia», afirma Daniela Aránguiz.
Estas palabras fueron parte de las ideas y reflexiones que la comunicadora del ámbito de la farándula, de 36 años, expresó sobre su separación de Jorge Valdivia.
Aránguiz y el ex futbolista de 39 años estuvieron 17 años casados y tienen dos hijos. Ella explicó en Podemos Hablar que su marido ya no vive en el hogar familiar. Así continuaron sus palabras tras lo enunciado en un principio:
«Ahí hay un problema de inseguridad, un problema que se tiene que tratar. Siempre yo me he terapeado, porque soy un poquito bipolar. Me gusta el tema sicólogo, es un tema país que debería estar dentro de la salud.
«Jorge nunca creyó en eso. Ultimamente sí. Una de la condiciones de poder tener una relación bonita conmigo es hacerse terapia. (Ella le planteó hacerse terapia de pareja y él) Se reía. (Ahora) El lo está haciendo por algo de él, es una iniciativa propia.
«Jorge es súper influenciable y todo nuestro matrimonio me costó muchos años sacarle muchos amigos, sacarle muchas cosas de encima, amigos que vienen del mismo fútbol. Y ya no tengo ganas.
«Es influenciable en algunas cosas y yo ya cumplí una edad en que ya no quieres aguantar más. Pero lo sigo amando, como hombre, como el papá de mis hijos. Dios sabe sabe si más adelante vamos a tener una nueva oportunidad en nuestro matrimonio.
«Cuando yo tenía 20 muchas veces le echaba la culpa a las mujeres. Y no. A los 30 te das cuenta que la mujer no tiene la culpa. Que el que te tiene que respetar es tu marido, no una mujer que no tiene nada que ver contigo.
«El duelo lo hice hace mucho rato. Venía haciendo este duelo hace seis meses. De a poco se fue muriendo lo que nosotros formamos. Le dije a Jorge que cuando viviéramos en Chile nuestra relación iba a decaer y le dije que no me soltara. Y me soltó. Sí. Me sentí abandonada en todo. Porque di toda mi vida por este matrimonio.
«Dejé muchos proyectos. Iba a ser la animadora de Yingo. Alex Hernández lo puede corroborar. En vez de la Cata Palacios iba a ser yo. Dije que no. Me llamaron de todas las temporadas de Maldita Moda y siempre dije que no para acompañarlo en su carrera. Dejé de hacer mi práctica de la universidad por irme a Emiratos Arabes con él. Y siempre aposté por mi familia. Siempre aposté por él. Siempre lo puse a él primero que a mí. Y ahora no».