«Me tomé la botella. Me tomé otra botella. Y digo ‘voy a hacer un live’. Estaba muy entonada. Despierto al día siguiente y tenía 220 mensajes en WhatsApp…», recuerda Pamela Díaz
«De repente digo ‘me acordé que tengo un Topo Gigio’, un peluche. Y pongo al Topo Gigio sentado aquí, y digo ‘este weón no ha tomado hace no sé cuánto tiempo’, y voy y le empiezo a dar copete», recuerda Pamela Díaz sobre la transmisión en vivo que realizó por Instagram en plena cuarentena, al inicio de la pandemia, y luego de haber bebido dos botellas de vino.
La comunicadora de 42 años estuvo en Podemos Hablar junto a Diana Bolocco, José Miguel Viñuela y Andrés Celis y este fue su relato:
“En la pandemia teníamos una reunión de La Noche es Nuestra por Zoom, que me carga meterme al Zoom, entonces llevé una botella de vino blanco. Y en la conversación, buena onda y todo, me tomé la botella. Entonces dicen ‘ya, se acabó la reunión’, y yo quedé prendida”
José Miguel Viñuela: “¿Qué hiciste?”
Pamela Díaz: “Me tomé otra botella. Y digo ‘voy a hacer un live’, estaban de moda los lives. Estaba entonada, hablaba bien todavía. Llamo a Nacho Gutiérrez y le digo ‘hagamos un live’. ‘Ya, ok, vamos amiga’. Empiezan a llegar mil, dos mil, tres mil personas, cuatro mil. Y me dice ‘pero Pame, ¿estás bien?’. ‘¡Estoy súper bien poh!’.
“De repente me dice ‘amiga, no tengo mucha batería…’ Entonces yo tengo dudas si es que me dejó porque sintió que yo estaba nada que ver para hacer un live, porque estaba medio entonada. Y se le cortó y quedé sola en el live con mucha gente, y la gente me decía ‘pero llama a otro famoso’.
“Y le digo a (su asistente) Vero ‘llama a Jeanphi’, para que me ayudara, si era mi compañero. Se mete Jeanphi, estábamos en el live y pasa Martín Cárcamo, y yo ‘¡está Martín Cárcamo! ¡Hola weón!’. Como loca. Entraban a saludarnos al live. Después Pancho Saavedra, ‘ese weón me carga como se ríe’, yo de curada, y es mi amigo.
“Empezaban a pasar todos los famosos y yo con todos… Y Jeanphi me decía ‘ten cuidado, porque los ejecutivos… (de Chilevisión, donde Díaz entonces estaba contratada)’.
«De repente digo ‘me acordé que tengo un Topo Gigio’, un peluche. Y pongo al Topo Gigio sentado aquí, y digo ‘este weón no ha tomado hace no sé cuánto tiempo’, y voy y le empiezo a dar copete.
“Empecé a preguntarles puras estupideces a Jeanphi. En eso pasaba gente y de repente pasaba la Vero, ‘¡Pamela, corta el live weona! ¡Tu mamá está enojada! Voy a ir a tu casa a cortarte el live’. Y yo ‘pero cómo tan exagerada’. Estuve dos horas.
“Después de ese live, que estaba muy entonada, despierto al día siguiente y tenía 220 mensajes en WhatsApp. Mi mamá me odiaba, una vergüenza para el país. No contesté ni una cuestión. Y me llama por teléfono un amigo mío, José Miguel Viñuela. Y me dice ‘amiga, muchos amigos me llamaron por teléfono, ‘¿viste a la Pame? Estaba un poquito entonada. Desubicada. Y ustedes trabajan juntos», y toda la cuestión.
“‘Pero Jose, sí, igual estaba entonada. Pero estaba en mi casa, no es tanto, no le pongas color’. ‘No amiga, porque yo te quiero mucho y encuentro que estamos trabajando juntos en muchas marcas, nos está yendo la raja, ¡y tú no puedes mandarte esa cagada! ¡No puedes estar tomando, las marcas nos quieren! ¡Protégete!’.
“Pasan dos semanas, ¡y este aweonao le corta el pelo a ese weón, y nos echan del supermercado!».