Glamorama
Yamna Lobos en fotos de archivo junto sus ex pololos el actor Cristián Arriagada y el bailarín Thiago Cunha.

«Sí poh, tuve romances con personas ligadas al espectáculo, entre actuación, deporte y baile… Choque de egos», expresa Yamna Lobos

Autor: Equipo Glamorama / 8 abril, 2023

“Rodrigo no es persona vinculada al mundo (del espectáculo) y tú tuviste romances con personas conocidas», le comentó Eduardo Fuentes, conductor de Buenas Noches a Todos, a Yamna Lobos, quien esta semana estuvo en el late de TVN.

La bailarina de 40 años que se hizo conocida en Rojo, y Técnico Superior Deportivo, trabaja en Temuco, a donde se trasladó en 2022 junto a su marido, el ingeniero en informática Rodrigo Ramírez, y su hija de tres años.

Frente a la consulta de Fuentes, Lobos respondió: “Sí poh, yo tuve romances con personas ligadas al espectáculo, entre actuación, deporte y baile”, refiriéndose a pololeos como con el actor Cristián Arriagada o el bailarín Thiago Cunha.

Eduardo Fuentes: “¿Es muy distinto?”

Yamna Lobos: “Sí, es súper distinto. Tuve muy buenas parejas, con sus altos y bajos, como todas. Pero qué es lo que me pasó a mí, y creo es el punto de conflicto que tuve, que fue el choque de egos. Y con eso tuve complicaciones de lidiar.

“Y otros aspectos que también estaban relacionados con lo mismo, con la exposición, con el tema de que también fue una época muy mediática donde calzaban estas relaciones, estaban muy expuestas, programas de farándula.

“Si uno expone todo eso va dañando la relación. Y claro, quizás tampoco fueron relaciones tan serias, de proyección a futuro. Quizás no eran compatibles dos personas muy etéreas. Casi todas fueron así.

“Yo una de las características que tengo es ser muy soñadora. Sumándole a lo que estaba viviendo en el momento, a la inmadurez y a esto de ser tan idealista y soñadora, tuve tropiezos en el ámbito amoroso. Y por el mismo ámbito donde nos movíamos.

“Todo en la vida es aprendizaje y yo siempre he sacado lo mejor de todas las personas que pasan por mi vida en trabajo, en amistad, en amor, en todo. Siempre hay algo que aprender, todo suma en la vida.

“Sin pedirlo, pero sí de alguna forma direccionándolo, Rodrigo no tiene nada que ver con el mundo artístico. El es de profesión ingeniero en informática. Muy diferente. No veía tanta tele. Otra cosa. Muy opuesto a mí en todo sentido y eso fue lo que nos atrajo y nos encantó de cada uno”.