Hasta las 9 AM en el motel El Buda y luego desapareció de Instagram: el nuevo carrete de Naya Fácil que terminó mal
«No saben cuánto lastiman, en serio que sí… Chao mis facilines, donde la me lleve la vida», fue el último mensaje que Naya Fácil publicó cerca de las diez de la mañana de este jueves luego de una madrugada de discoteca, carrete, reggaetón, champaña, motel y un joven acompañante.
Fue otra noche de la influencer de 26 años con más de dos millones de seguidores en Instagram que empezó con alegría y deseos de «relajarse» y pasarlo bien y terminó con ella quejándose y lamentándose, con los signos en su rostro de la pena y el maquillaje corrido.
A las 08.20 de la mañana de hoy Naya Fácil estaba en la cama de una habitación del motel El Buda, en Recoleta. La acompaña otra mujer que carreteó con ella. «Nos dijeron colágeno…», comentaba, con una sonrisa y el relajo de los tragos de la noche. Hacía alusión a dos jóvenes que la acompañaban a ella y su amiga y que «se fueron a poner la cosa al baño…».
Poco después la celebración terminó y Nayadeth Neculhueque enfrentaba la cámara de su celular con otro ánimo, entre las sombras, llena de tristeza, para expresar que «fue todo, chiquillos, en serio, estoy chata. Comenzó lo que todos querían. Me hirieron…
«Todos quieren eso, en serio. Yo ya estoy chata. Estoy chata de la gente. Gente cul…, no saben cuánto lastiman, en serio que sí. Chao mis facilines, donde la me lleve la vida”.
Hasta las cinco de la tarde de este jueves la figura de las redes que antes ejerció el comercio sexual no volvía aparecer en su Instagram, siendo que acostumbra compartir al menos 20 stories a diario.
En Twitter, o X, su nombre volvía a escalar lugares en el ranking de lo más comentado. Allí se dieron versiones según las cuales haría compartido, más o menos a la misma hora en que estaba en la cama con su acompañante, videos íntimos a través de su canal de WhatsApp. Una versión que sumó comentarios, críticas y defensorías en la red social. Como otras veces ha ocurrido.
