Glamorama
Tita Ureta y Spiro Razis durante su matrimonio en Costa Rica, en una imagen compartida en Instagram por la fotógrafa @dixianasb

«Fue en Costa Rica el matrimonio. En la playa, mientras unos surfeaban, nos casó una amiga… Fue a pie pelado», relata Tita Ureta

Autor: Equipo Glamorama / 18 marzo, 2023

“Él me pidió matrimonio en Costa Rica y fue en Costa Rica el matrimonio, súper chiquitito, como cien personas, llegaron amigos, familiares», cuenta Tita Ureta sobre su boda, en mayo de 2022.

La surfista, elegida Embajadora del Festival de Viña 2023 y panelista de Juego Textual, en Canal 13, se casó con el también surfista Spiro Razis -FOTOS DEL MATRIMONIO-.

La celebración se realizó de día, en la terraza y jardín de un local con salida a la playa.

En un capítulo del late Buenas Noches a Todos emitido hace unos días por TVN, la hija de Emeterio Ureta relató detalles de la celebración:

“Hace un año y un poquito más, estábamos surfeando los dos y me dice ‘oye, ven un poco para acá’. ‘No, estoy bien’. ‘Ven un poco’. Y a mí no me gustan las joyas, nunca me han gustado, nada que sea muy aparatoso. Y si tengo joyas me gustan que sean de estas que no son de verdad. Y además no me gustan mis manos, mis dedos.

“Le dije ‘nunca quiero usar un anillo que sea muy llamativo, no me gustaría’. Entonces me regaló esta olita, que la tengo aquí (en su mano), que es para mí el detalle más simbólico. Nunca más me lo saque y para mí es como mi conexión con él, mi conexión con el agua y es algo súper simple, de los dos.

“Imagínate, de mi círculo de amigas, que todas tenían unos anillos que es como ‘a ver tu roca’. Para mí era algo muy sencillo, muy de los dos y fue la mejor forma. Spiro es un hombre de pocas palabras, muy pocas palabras. Se acercó y me dijo si me quería casar con él. Ya estaba súper conversado igual.

“Me hacía bien también ya estar viviendo juntos, estar en una relación. Yo soy Acuario, súper libre, ojalá que no me amarre nada a nadie, entonces también como que Spiro dijo ‘ya, vamos serio, vamos juntos, hagamos equipo’. Y ha sido súper bonito este proceso.

“Él me pidió matrimonio en Costa Rica y fue en Costa Rica el matrimonio, súper chiquitito, como cien personas. Llegaron amigos, familiares. Y era de la forma que nosotros queríamos. Estar en la playa, mientras unos surfeaban, nos casó una amiga. Estamos casados por la ley de Costa Rica, todavía no lo hemos convalidado aquí en Chile.

“Voy hace muchos años a Costa Rica, es mi vía de escape, tengo mi grupo de amigas allá, y si me casaba aquí en Chile iba a tener que hacer un matrimonio tradicional, invitar a mucha gente por compromiso y yo quería hacer algo chiquitito, súper barato.

“Unos amigos me ayudaron a sacar las hojas y hacer la decoración. La Emilia Daiber fue a comprarle un cinturón a mi papá, que no tenía. La Kika Silva no me acuerdo en qué ayudó a Spiro. Todas mis amigas cercanas me ayudaron en algo. Era un matrimonio súper colaborativo. Yo no quería nada muy ostentoso y así fue, a pie pelado, en una playa”.